Ante la pretensión del Congreso de favorecer a las universidades cuya licencia fue denegada por no cumplir los requisitos mínimos de calidad para formar profesionales, diversos colectivos de jóvenes marcharon por las calles del centro de Lima en rechazo a dichas medidas.
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Los jóvenes se concentraron en la plaza San Martín, desde donde avanzaron hacia la avenida Miguel Grau cerca de la avenida Abancay, para después dirigirse por el Parque Universitario y regresar a su punto inicial de reunión, la plaza San Martín.
Como se sabe, en el Congreso hay legisladores con intereses en universidades particulares que impulsan estas reformas que sólo precarizarían más todavía la educación.
Las únicas excepciones deberían ser las universidades nacionales, como la San Luis Gonzaga de Ica, que debería pasar por un proceso total de reorganización porque vive de recursos del Estado y el declive en los últimos años se debió a una pésima gestión.
Aunque la Sunedu no es la maravilla, pues también tiene deficiencias, no debería retrocederse al nivel de antes, cuando los rectores, a través de la Asamblea Nacional de Rectores se dedicaron a defenderse los malos a los peores, lo cual terminó con una degradación total de la universidad, en especial parte de las universidades particulares.
Los manifestantes, ente los que se encontraban numerosos estudiantes, portaron carteles y corearon lemas contra los anuncios del Congreso en esta materia.
