Enfrentamiento por privatización de mercado causa dos muertos en Piura
La arbitrariedad de la alcaldesa de Piura, que se negó a tomar en cuenta a los comerciantes de un mercado, produjo un enfrentamiento con la policía durante una marcha, que terminó con dos muertos.
La arbitrariedad de la alcaldesa de Piura, que se negó a tomar en cuenta a los comerciantes de un mercado, produjo un enfrentamiento con la policía durante una marcha, que terminó con dos muertos.
Pese a la oposición de los comerciantes que trabajaban durante muchos años en el lugar, la alcaldesa se negó a incluirlos en la toma de decisiones y ordenó el desalojo del mercado, único medio de supervivencia de muchos trabajadores.
Además de los muertos hubo decenas de heridos y daños materiales, presuntamente ocasionados por vándalos infiltrados entre los trabajadores, pues los comerciantes indicaron que se pretendió hacerlos pasar como gente violenta.
Los hechos violentos comenzaron cuando gente de mal vivir lanzó piedras y palos contra la policía, que respondió con bombas lacrimógenas, tras lo cual se registraron algunos actos de pillaje.
El director de la Policía Nacional, Miguel Hidalgo, informó la noche del miércoles que dos civiles fallecieron en los actos de violencia por herida de arma de fuego y golpe con objeto contundente.
Una de las víctimas fue identificada como Carrasco Naranjo Martinel, esposo de una comerciante. Los afectados llegarían al medio centenar y los detenidos son 33.
Rudy Palomino, comerciante del lugar, informó que la marcha fue pacífica y buscaba dialogar con la alcaldesa Mónica Zapata, al vencerse el plazo para abandonar los exteriores del centro de abastos. Zapata no permitió el diálogo y entonces los extraños desataron la violencia, dijo Palomino, quien asegura que los daños son intencionales y desatados con la finalidad de manchar las reivindicaciones de los comerciantes.
Además de los muertos hubo decenas de heridos y daños materiales, presuntamente ocasionados por vándalos infiltrados entre los trabajadores, pues los comerciantes indicaron que se pretendió hacerlos pasar como gente violenta.
Los hechos violentos comenzaron cuando gente de mal vivir lanzó piedras y palos contra la policía, que respondió con bombas lacrimógenas, tras lo cual se registraron algunos actos de pillaje.
El director de la Policía Nacional, Miguel Hidalgo, informó la noche del miércoles que dos civiles fallecieron en los actos de violencia por herida de arma de fuego y golpe con objeto contundente.
Una de las víctimas fue identificada como Carrasco Naranjo Martinel, esposo de una comerciante. Los afectados llegarían al medio centenar y los detenidos son 33.
Rudy Palomino, comerciante del lugar, informó que la marcha fue pacífica y buscaba dialogar con la alcaldesa Mónica Zapata, al vencerse el plazo para abandonar los exteriores del centro de abastos. Zapata no permitió el diálogo y entonces los extraños desataron la violencia, dijo Palomino, quien asegura que los daños son intencionales y desatados con la finalidad de manchar las reivindicaciones de los comerciantes.