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Según refirió Ariel Bracamonte Fefer, hijo de la empresaria asesinada Myriam Fefer Salleres, tras el careo de este viernes 9 de abril se sintió contrariado por la actitud de su hermana Eva.
Eva Bracamonte está presa por ser la presunta autora intelectual del asesinato de su madre por intermedio del sicario colombiano Hugo Trujillo, cuya extradición de Argentina fue solicitada por las autoridades peruanas. En una cárcel de Argentina donde se encuentra Trujillo, se había ufanado de matar a Myriam Fefer por encargo de su hija.
Antes del careo Ariel declaraba que estaba a favor del cambio de la orden de detención contra su hermana por una de comparecencia, y reveló que lagrimeó al ver a su hermana recluida, pero al salir de la diligencia dijo estar chocado por la reacción de Eva.
Si bien a su llegada al penal de mujeres de Chorrillos Ariel se mostró a favor de que le cambien a su hermana la orden de detención por la de comparecencia, a su salida su reacción fue totalmente contradictoria.
En las breves declaraciones que sostuvo ante la prensa, Ariel manifestó que hubo contradicciones entre Eva y él, así como con Liliana Castro, presunta cómplice en el crimen.
Una de las contradicciones se refirió a la llamada del sicario a Eva después de perpetrado el homicidio. Ella dice que no respondió, porque tiene sueño profundo, pese a que las autoridades verificaron que la llamada fue contestada.
Ariel anunció que no apelará si la justicia pone en libertad a su hermana. Pero sí lo hará en el caso de Liliana, pues la considera la principal responsable del asesinato.
