Por Capitán Eloy Villacrez
Hoy jueves 27 el diario El Comercio hace eco de la iniciativa de un “almirante” así entre comillas de nombre Fernando D´ Allesio, quien dio una “brillante” idea, de hundir el Monitor “Huáscar” el próximo 8 de octubre en Punta Angamos, con el marco de las flota peruana y chilena, y además rendir un tributo a Pratt (héroe chileno), con asistencia de los presidentes Humala y Bachellet. Tema que linda con la estupidez y que hay que ser un débil mental para plantearlo, NO SE PUEDE PONER DE IGUAL A IGUAL al que vino a depredar, asesinar y robar, con aquellos que defendieron a su patria de una agresión injustificable, y que solo se explica esa guerra por la presión internacional de Inglaterra para apoderarse del salitre que era un producto estratégico para fabricar pólvoras y para la agricultura venida a menos en Europa y el mundo por las guerras que afrontaban.
Haciendo un paralelismo con nuestra historia, sería una locura o una torpeza colocar en el mismo nivel a Pizarro y Túpac Amaru; el español vino a asesinar y robar, y Túpac Amaru, su esposa y sus hombres dieron su vida para liberar a nuestro pueblo, Jamás debemos olvidar, tenemos deberes sagrados que cumplir, como expresó Bolognesi, con las decenas de miles de familias que no tuvieron padres al no volver a sus hogares de los campos de batalla y es más los miles de asesinados por la soldadesca chilena para aplicar el derecho a saqueo, que fue la promesa que Chile les hizo a su soldados cuando se embarcaron hacia el Perú.
Esa es la realidad, que pretenden “tapar” con ceremonias y shows mediáticos. El hecho es que aún Chile tienen bajo su poder nuestras provincias de Arica y Tarapacá, aplastando los cánones de la jurisprudencia internacional, que NNUU claramente indica con la resolución N.o 1514, cuando señala que los territorios conquistados tienen un derecho inalienable a la libertad absoluta, al ejercicio de su soberanía y a la integridad de su territorio nacional. En el punto 6 indica indudablemente que. “Todo intento encaminado a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas”.
ESTO ES LO CONCRETO Y QUE CALLAN LOS QUE FORMAN PARTE DEL PODER POLÍTICO, ECONÓMICO Y AHORA UNA MAYORÍA DE LOS GENERALES Y ALMIRANTES. En referencia a estos últimos, alguien dijo que con la espada de Grau y el sable de Bolognesi LOS CONVIRTIERON EN EUNUCOS..., porque con su conducta dejaron de ser hombres y menos patriotas, solo usan al país para robar el presupuesto, cobrar pensiones y sueldos, que jamás justificaron, vanagloriándose casi todos ellos de haber asesinado pueblos normalmente quechuahablantes, logrando sus entorchados y grados militares con la sangre de hermanos que muchas veces no tuvieron nada que ver en el enfrentamiento que tuvimos años atrás. Como ejemplo palpable para alanzar mayores jerarquías, está el actual presidente del Perú OHT, quien con “Madre mía” pago el peaje para llegar a Teniente Coronel, de otra forma no llegaba ni a sargento por su incapacidad.
Compatriotas recordemos siempre la historia y evitemos hacer el juego a la política del “olvido chileno” y que la “voluntad del vencedor se impone al vencido”, aplicada con prebendas por Chile a las altas clases sociales y económicas del Perú, desde que robaron nuestras provincias de Tacna, Arica y Tarapacá, mutilando a “perpetuidad Tarapacá”, lo cual es inconcebible con el nuevo ordenamiento, expresado líneas arriba, puesto que no teníamos fronteras y al ocupar militarmente nuestro territorio, nos obligaron a firmar el Tratado de Ancón (1883), luego de 4 años de asesinar a nuestro pueblo, robar todo lo que era posible y destruir nuestra infraestructura agraria, de puertos y ferrocarrilera, para que según notas del gobierno chileno de ese entonces el Perú no “levante cabeza jamás”. Además se apoderaron como garantía de Tacna y Arica, negándose a hacer el plebiscito a los diez años, incumpliendo su propia imposición, solo por presión internacional aceptaron la partición de Arica y la separación del Perú, 40 después fue restaurada Tacna a nuestra heredad, esa es la historia que quieren hacernos olvidar ciertos pobres diablos, unos con uniforme, caretas de diplomáticos, periodistas, historiadores y otros que conforman una fauna antipatriótica.
Debemos reconocer que el “Huáscar” es un trofeo de guerra y así lo presenta Chile, como tal que hagan lo que quieran con el monitor. Creo que Grau vería con vergüenza la falta de patriotismo al pretender unir a los asesinos y asesinados, sin haber saldado cuentas que están pendientes, solo cuando Arica y Tarapacá se reintegren a nuestra heredad, podemos pensar en cooperar y hacer proyecto futuros, antes NO, sería traicionar a los que murieron para que nuestro nación siga viviendo.
ASPRATA, Asociación Patriótica por la Recuperación de Arica y Tarapacá, enarbola la lucha reivindicativa por nuestra heredad, las puertas están abiertas a todos los patriotas y a los que aspiran a ocupar alguna cargo por elección lo hagan pensando que esa batalla por la vuelta al seno de la patria de Tarapacá y Arica está pendiente. Nos reunimos todos los lunes a las 7 pm en el local de la Sociedad Patriótica Tarapacá, que figura en el logo.
Nota. Siento vergüenza por D¨Allesio. Alguna vez tuvo una conducta con sentido de patria, parece que ya olvidó todo, cuando concordamos que había que tomar las armas para derrocar a Fujimori, lástima que algunos de los comprometidos, cuyos nombres los publicaré en su momento, desertaron.
DIARIO EL COMERCIO
Jueves 27 DE FEBRERO DEL 2014 | 06:31
“El monitor Huáscar”, por Fernando D’Alessio
Para el autor, una cosa queda pendiente para cerrar las heridas de la guerra de 1879, el monitor “Huáscar”
FERNANDO D’ALESSIO (*)
Vicealmirante
La Corte Internacional de Justicia de La Haya se ha pronunciado sobre la disputa relacionada con la delimitación de la frontera marítima entre el Perú y Chile, y su fallo debe ser acatado sin dilaciones por ambos países, los cuales voluntariamente aceptaron tener a este impecable juez para dirimirla. Posiblemente existan muchos chilenos y peruanos que no estén conformes con el fallo que ameritó el estudio detallado por muchos años de personas doctas en este tipo de jurisprudencia. El 27 de enero del 2014 será recordado como el día que se definió para siempre la frontera marítima entre ambos países, fallo que nos dejó con poco más de 300 metros de costa seca, ya que la frontera marítima según dicho fallo se inicia en el mar en la proyección del paralelo que pasa por el Hito 1. El veredicto es clarísimo, no deja duda, solo nos queda a ambos países cumplirlo con celeridad y sin discusiones.
Qué duda cabe que esto inicia un fortalecimiento de nuestras relaciones, que debemos manejar conjuntamente para seguir desarrollando económicamente a nuestros países y sacar de la pobreza a una gran cantidad de compatriotas de ambos países que se lo merecen. El Perú y Chile son las estrellas de América Latina, ambos ocupan los dos primeros puestos en el prestigioso Índice de Competitividad del IMD de Lausana, Suiza; son los dos países con mejor desempeño económico de la región; son dos de los cuatro países, con Colombia y México, que hoy forman el acuerdo más importante logrado en nuestros años de Independencia: la Alianza del Pacífico, el cual puede lograr resultados sin precedentes para nuestras naciones. Existe inversión importante chilena en el Perú y peruana en Chile, ojalá se acreciente para seguir avanzando.
Una sola gran cosa queda pendiente para cerrar las dolorosas heridas de una nefasta guerra, la de 1879, el monitor “Huáscar”. El 8 de octubre del 2014 se cumplirán 135 años del glorioso combate de Angamos, donde se inmoló el más grande de los peruanos, el gran almirante del Perú, don Miguel Grau Seminario. Debemos trabajar juntos chilenos y peruanos para cerrar para siempre estas heridas, llevar al monitor, ambas escuadras navegando juntas desde Talcahuano hasta la punta Angamos, con ambos presidentes Bachelet y Humala embarcados en sus respectivos buques insignias. En una ceremonia naval se procederá a abrir las válvulas de fondo para que se hunda en esas aguas, como hubiera sido el deseo de Grau, su maravilloso monitor, y mientras se hunde todos los buques, chilenos y peruanos, dispararán 21 cañonazos y sendas ofrendas florales se lanzarán al agua al término del hundimiento, donde reposará para siempre el glorioso “Huáscar”. Ambas escuadras con presidentes abordo navegarán hacia Iquique para en una ceremonia similar, con la gloriosa “Esmeralda” como testigo, se rinda homenaje donde se inmoló el más grande de los chilenos, el gran almirante de Chile, don Arturo Prat Chacón. En ese momento Grau y Prat se abrazarán en el cielo mirándonos iniciar hermanados una etapa de expectante trabajo conjunto para bien de nuestras generaciones venideras terminando para siempre rencores, rencillas y desconfianza, las cuales deben desaparecer en países hermanos que se convertirán muy pronto en países desarrollados económicamente.
(*) Por un error involuntario publicamos esta columna en la edición impresa bajo el nombre de Patricia del Río. Ofrecemos las disculpas del caso a nuestros lectores.
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