ositranHerbert Mujica Rojas

Todo indica que hay un cambio en la mentalidad de los funcionarios del regulador de infraestructura de transporte público, es decir OSITRAN, porque en lugar de cautelar los intereses del Estado, se han propuesto hacernos reír a carcajada limpia con torpezas una más grande que la anterior.

Verbi gracia, don Obed Chuquihuayta, Gerente General y Jean Paul Calle Casusol, Gerente de Asesoría Jurídica de OSITRAN, insistieron, con energía juvenil y reiterada, en despedir a un trabajador que meses antes ya había sido despedido ¡por ellos mismos! Se trata del ex funcionario Jesús Javier Balladares Sandoval sobre quien se está concentrando toda la ira de los mencionados.

SERVIR los deja en ridículo

En la breve resolución de SERVIR, adjunta, fácilmente se puede apreciar lo absurdo del proceder de los funcionarios del regulador. Peor aun cuando la mayoría, o casi todos, los partícipes son abogados de profesión y reciben jugosos sueldos de nuestros impuestos.

Así, por ejemplo, al parecer, los ejecutivos de OSITRAN desconocen el principio que se enseña en los primeros ciclos de Derecho, iuspuniendi o facultad sancionadora, como se lo recuerda vergonzosamente SERVIR.

O la forma de interpretar y castigar una falta calificada como Grave, y a sabiendas que el supuesto responsable ya está expulsado, volver a hacerlo expresando en la resolución de despido que, conociendo de este hecho, la nueva resolución “forme parte de su legajo personal”, con lo cual, en la práctica, se estaría dejando sin sanción una improbable falta laboral.

En pocas palabras, el ridículo total y más carcajadas de celebración del dislate.

Hagamos memoria

Esta sanción proviene de una supuesta falta cometida cuando no se declararon determinados ingresos y, por ende, no se abonaron los impuestos que corresponde a SUNAT en el 2012, y que el “brillante” contador entrante, en el 2013, calificó como omisión sancionable.

El yerro motivó que OSITRAN abonara a SUNAT más de S/. 83 mil, según él, para evitar una multa que superaba el millón de soles.

Luego, en diciembre del 2014, el mismo contador se rectifica y enmienda, a su vez, los formularios presentados y ya rectificados, por su erróneo consejo, en el 2013.

Es casi seguro que ya debe estar requiriendo a SUNAT la devolución del dinero indebidamente abonado, con lo cual, el proceder de Balladares siempre fue el correcto, pero el encono de Chuquihuayta y Calle pudo más que la razón y prefirieron el papelón en que metieron a OSITRAN.

¿Habrá castigo para los culpables reales?

Para nadie es un secreto que doña Patricia Benavente, presidente de OSITRAN, otorga enorme predilección a don Obed y a don Jean Paul. Así, a Obed le permite despedir personal sin consultar, tomarse atribuciones más allá de su cargo, remodelar su oficina con mucho mejor estilo y costo que la de ella, rodearse de un ramillete de lindas abogadas como asesoras, pero que a la vista de los hechos, resultan poco eficientes.

¿Cómo entender que a las abogadas Patricia Reynaga Alvarado, Farydee Montoya Farach y Edith Huancauqui Rodríguez, asesoras de gerencia general, se les haya pasado la absurda propuesta del Gerente Legal, Jean Paul Calle Casusol?

¿Verdad que lo premiaron con un viaje de capacitación a Europa y cuyas cuitas empezará a contar hoy viernes en OSITRAN? Como diría Condorito: ¡exijo una explicación!

¿Y el causante de todo esto, el contador Ysmael Mayuri Quispe, será sancionado o será premiado con un curso o viaje?

Así de absurdas son las cosas en OSITRAN.

13.11.2015