Químicos farmaceúticos no deben recetar medicamentos

Solo pueden brindar orientación al público y recomendar fármacos de venta libre.

Digemid recuerda que la prescripción de medicinas es facultad de médicos, oculistas y obstetras.

Los químicos farmacéuticos no deben recetar medicamentos pues esta facultad es exclusiva de los médicos, odontólogos y obstetras quienes hacen una evaluación del estado de salud de sus pacientes antes de prescribir un tratamiento recordó el director general de la Dirección General de Medicamentos Insumos y Drogas (Digemid), Víctor Dongo Zegarra, tras lamentar lo sucedido con la joven estudiante de Ciencias de la Comunicación, Noemí Sabrina Palma Borgo, quien padece de parálisis parcial generada aparentemente por la aplicación de una inyección -sin que le haya sido recetada por un médico- en una botica de San Juan de Lurigancho.

 

“Es común que ante alguna molestia o malestar, las personas acudan a una farmacia o botica y pregunten al químico farmacéutico o, en el peor de los casos, al vendedor, qué medicamentos utilizar para controlarlas, sin saber que este tipo de conducta es muy peligrosa para su salud porque constituye una forma de automedicación que podría provocar reacciones adversas con consecuencias lamentables y hasta irreversibles en su organismo”, advirtió.

Dongo explicó que el rol del químico farmacéutico como director técnico de una farmacia o botica es orientar a la población respecto a los medicamentos que le han sido recetados por un prescriptor autorizado, además de informar sobre las alternativas existentes a fin de que pueda elegir el producto más acorde a su presupuesto considerando que los fármacos deben ser consignados en la receta en su denominación común Internacional (DCI) o nombre en genérico.

“Con ello, las personas podrán optar por un medicamento genérico, genérico de marca o de marca en base al principio activo. Sin embargo, los químicos farmacéuticos sí pueden recomendar medicinas de venta libre, como analgésicos (para el dolor), antihistamínicos (contra la congestión nasal), entre otros.

Rol de la población
Asimismo, el director de la Digemid dijo que la venta sin receta en farmacias y boticas de productos que requieren una prescripción no es responsabilidad exclusiva de los químicos farmacéuticos, pues la población también debe tomar conciencia del papel que le corresponde para poner fin a esta peligrosa modalidad de automedicación.

“Las personas tiene un papel fundamental pues así como un químico está prohibido de vender medicamentos sin receta, la población también debe tomar conciencia de los peligros que implica para su salud y la de sus seres queridos el solicitar medicamentos a personas no autorizadas para recetárselos; por ello, la responsabilidad es de ambas partes”, remarcó.

Reacciones adversas
Dongo recalcó que esta forma de automedicación puede generar reacciones adversas que podrían no solo agravar el estado de salud de las personas en lugar de mejorarlo sino que podría ocasionar consecuencias irreversibles.

“Solo una evaluación médica apropiada permite determinar el tratamiento más adecuado para cada paciente, pues sin conocer su historia clínica, no podemos prever las reacciones que podría tener su organismo ante determinado tratamiento”, señaló.

En tal sentido, el director de Digemid manifestó que los sucedido con la joven estudiante que se encuentra internada en el hospital Dos de Mayo, es una clara muestra de los peligros a los que se exponen quienes en lugar de consultar al médico, recurren a una persona no autorizada para prescribir.

Del mismo modo informó que su entidad ha dispuesto una verificación al citado establecimiento farmacéutico para determinar si se cumplen con condiciones adecuadas de dispensación, almacenamiento, entre otros.

“Nuestro mayor deseo es que esta joven se recupere pronto, por nuestra parte seguiremos recordando a la población que automedicarse es una forma de jugar peligrosamente con nuestra salud, pues no solo nos podría generar secuelas irreversibles, sino que nos podría llevar a la muerte”, concluyó.