Exportaciones cerraron con una caída de 5.6% entre enero y mayo
Presidente del Comité de Madera e Industria de la Madera de ADEX, Erik Fischer Llanos, afirmó que faltan cubrir vacíos internos para aprovechar potencial del sector.
Recordó que existe un área de aproximadamente 17 millones de hectáreas de bosques de producción permanente para ser provechadas bajo un manejo forestal sostenible (concesiones), lo que repercutiría en la generación de puestos de trabajo.
La exportación de maderas y sus derivados sumaron entre enero y mayo US$ 63.6 millones, lo que significó una caída de 5.6%. Este resultado no solo es por la crisis internacional, sino también por factores internos, de ahí que se deba trabajar para poner en valor a nuestros bosques a fin de que ese subsector pueda acompañar el crecimiento nacional.
Así lo sostuvo el presidente del Comité de Madera e Industria de la Madera de la Asociación de Exportadores (ADEX), Erik Fischer Llanos, quien al referirse a las cifras, comentó que solo confirman la realidad: El Perú nunca ha comercializado grandes cantidades de productos maderables pese a que cuenta con el potencial para hacerlo.
Comentó que a la par del panorama internacional, ese comportamiento obedece a los vacíos existentes en el sistema forestal peruano, que van desde la ausencia del reglamento de la nueva Ley Forestal, la pendiente aplicación de la Ley de Consulta Previa, el desconocimiento sobre el desarrollo de esa industria y la ausencia institucional de los gobierno regionales que tienen a su cargo la administración de los bosques.
“El actual régimen posee la visión de trascender y tiene todas las herramientas para hacerlo. Poner en valor nuestros bosques es una manera de incentivar el crecimiento nacional porque no solo impulsa la parte económica, sino que permite combatir flagelos como el narcotráfico”, indicó.
En ese sentido, Fischer Llanos mencionó la necesidad de impulsar una política desde una perspectiva más técnica en la que el gobierno central termine de empoderarse del tema y los gobiernos regionales apliquen con eficiencia acciones de gestión y promoción a fin de lograr flujos de madera para la industria nacional y la exportación.
Citó la experiencia chilena, que sin un centímetro cuadrado de Amazonía, exporta cerca de US$ 6,000 millones anuales en productos forestales, mientras que el Perú con bosques amazónicos que ocupan un área equivalente al 60% de la superficie nacional, no sobrepasa los US$ 200 millones.
“Ante la falta de áreas forestales, nuestros vecinos del sur las crearon, aplicaron una política nacional de incentivos por más de 40 años e invirtieron en el desarrollo nacional de plantaciones. Al Perú le toca colocar en valor sus bosques templados, así como los tropicales”, agregó.
Asimismo, recordó que existe un área de aproximadamente 17 millones de hectáreas de bosques de producción permanente para ser provechadas bajo un manejo forestal sostenible (concesiones), lo cual repercutiría en la generación de miles de puestos de trabajo.