Unas 150 personas perecieron por la caída de un Airbus 320 de la línea alemana Germanwings, que se estrelló en el departamento de Alpes de Alta Provenza, en la región entre la Barcelonnette y Digne, en el sur francesa, colisión que no dejó lugar a la sobrevivencia de siquiera una vida.
La aeronave, de una filial de Lufthansa, había partido a las 10:00h de España de Barcelona con destino a Düsseldorf, con 144 pasajeros y una tripulación de seis personas, informó la Dirección General de Aviación Civil.
El avión había desaparecido del radar una hora después de su despegue. “No hay más auxilio, todos están muertos”, declaró un gendarme de Vernet, zona ubicada a unos kilómetros del lugar donde el avión se estrelló a 1,500 metros de altura, sobre el macizo de Estrop, en el vall de la Blanche.
Entre las víctimas se cuenta a dieciséis alumnos alemanes de cuarto grado, que viajaban con cuatro de sus profesores. Bild informó que habían sido invitados por el Instituto Giola de Barcelona a un programa de intercambio
Las autoridades francesas aseguraron que pondrán a disposición todos los medios necesarios para que las diligencias en la zona del accidente se realicen en las mejores condiciones, para su eficacia y sin demora.
La canciller alemana Angela Merkel se dirigió al público para enviar sus condolencias a todos los familiares de las víctimas y agregó que ha conversado con Mariano Rajoy y François Hollande. Aseguró que Alemania desplegará toda la ayuda posinñe en los aeropuertos y en la zona del siniestro, donde ella y el ministro de Transportes se harán presentes.
Una capilla ardiente ha sido instalada en Seyne-les-Alpes, un municipio vecino, a donde llegó una parte de las brigadas de socorro.
