En el portal del diario español El País del 2 de noviembre de este año, con el título “Una canoa casi intacta de más de 1.000 años de antigüedad, el último hallazgo en la ruta del Tren Maya”, se lee en el artículo de Anna Lagos

 

Me metí un poquito a la cueva y de repente vi lo que parecía ser un tronco de algún árbol, hasta que lo toqué y lo vi de frente, me di cuenta de la forma y dije: ‘¡Esto no es un tronco!’. Al interior de la embarcación había marcas de cortes muy rectos, que no eran hechas por la naturaleza, sino por el hombre”, describe emocionada la arqueóloga náutica y subacuática.

 

Comentario

Se puede emplear “al interior” con un verbo de movimiento, como entrar o dirigirse, etc.: “se dirigió al interior del inmueble”, pero no en otras situaciones. En el caso que analizamos, se ve con claridad que podemos sustituir “al interior” con “dentro de” o “en”, que en el ejemplo que examinamos es lo correcto.

 

Podemos decir por ejemplo:

 

Me metí un poquito a la cueva y de repente vi lo que parecía ser un tronco de algún árbol, hasta que lo toqué y lo vi de frente, me di cuenta de la forma y dije: ‘¡Esto no es un tronco!’. Dentro de la embarcación había marcas de cortes muy rectos, que no eran hechas por la naturaleza, sino por el hombre”, describe emocionada la arqueóloga náutica y subacuática.