La XVI Cumbre de los líderes del Movimiento No Alineado (MNA) en Teherán, la capital de Irán, se ha inaugurado en la mañana de este jueves con el discurso del Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
Durante su intervención en el acto inaugural de la Cumbre de Teherán, el Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán ha instado a los países poseedores de armas de destrucción masiva a cumplir lo antes posible con las obligaciones internacionales respecto al desarme nuclear, y ha expresado: “el desarme nuclear es una necesidad inmediata y una reclamación comprensiva”.
El ayatolá Jamenei ha deplorado el hecho de que el Gobierno de EE. UU., dotado con la mayor cantidad de armas de destrucción masiva, intente ser abanderado del ideario opositor a las armas nucleares.
Ha repudiado también las medidas de Washington de equipar al régimen de Israel con armas nucleares para que domine a los países oprimidos de la región. No obstante, ha asegurado que “las bombas atómicas no garantizan la seguridad” de las naciones.
Respecto al programa de energía nuclear de Irán, ha reiterado que la República Islámica nunca ha buscado dotarse de este tipo de armamento y tampoco “renunciará a sus derechos nucleares pacíficos”.
Ha destacado que la Doctrina política del país persa, que se basa en la idea de “energía nuclear para todos y arma nuclear para nadie”, se opone a la fabricación de armas atómicas.
A juicio del ayatolá Jamenei, las sanciones que impusieron algunos países occidentales encabezados por EE. UU., al país persa para detener el desarrollo de su programa de energía nuclear pacífico, han hecho más firme la voluntad de la nación iraní para lograr su objetivo.
En otra parte de sus declaraciones, el Guía Supremo de Irán se ha mostrado complacido por el hecho de que pese al transcurso de más de seis décadas desde la creación del MNA, los principales ideales del bloque hayan sobrevivido.
“Luchar contra el colonialismo, preservar la independencia política, económica y cultural, no alinearse a los polos de poder y fortalecer la integridad y cooperación entre los Estados miembros”, son algunos de los ideales de la agrupación, que pueden cumplirse a través de un enfoque colectivo y de esfuerzos aunados.
“Durante el pasado inmediato, hemos sido testigos del fracaso de las políticas de la época de la Guerra Fría, y del unilateralismo a que fue sometido el mundo después”, ha afirmado agregando que el mundo está siendo conducido hacia un nuevo sistema internacional, el cual debe establecerse sobre la base del respeto a los derechos de las naciones y una cooperación colectiva.
A juicio del ayatolá Jamenei, el MNA puede y debe desempeñar un nuevo rol en la construcción de ese ansiado sistema mundial.
“Afortunadamente, el panorama de los acontecimientos internacionales nos da la esperanza de un sistema multipolar, donde los polos tradicionales de poder serán sustituidos por un conjunto de Estados, culturas y distintas civilizaciones, con diferentes orígenes económicos, políticos y sociales”, ha precisado.
Esta sustitución de poderes, según el ayatolá Jamenei, permite a los países del bloque adoptar un papel digno e influyente en el ámbito internacional, y propiciar el terreno para instaurar una administración justa y cooperativa en el planeta.
“El mundo no debe ser controlado por unos pocos dictadores occidentales”, ha subrayado, instando a los países del organismo a formar una cooperación democrática mundial en el ámbito de la gestión internacional, medida que puede salvar a los países que están sometidos a los yugos de algunas potencias opresoras e imperialistas.
Asimismo, ha arremetido contra el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas debido a su estructura ilógica, injusta y no democrática.
Conforme a las palabras del Ayatolá Jamenei, EE. UU. y sus aliados marionetas, al usar dicha estructura errónea han logrado imponer al mundo sus opresiones, envolviéndolas con conceptos de nobleza.
“Ellos hablan de Derechos Humanos, mientras satisfacen los intereses de Occidente; hablan de democracia y lanzan intervenciones castrenses en los países; alegan luchar contra el terrorismo y apuntan a poblados indefensos de aldeas y ciudades con el fuego de su artillería. A su entender la humanidad está conformada por ciudadanos de primera, segunda y tercera categoría. La vida de las personas en Asia, África y América Latina carece de valor, mientras que en EE. UU. y Europa Occidental es valiosa. La tortura y el terror son justificados, si se cometen por EE. UU. y el régimen sionista”, ha añadido.
Además, ha repudiado la actuación de Occidente que presenta sus intereses como “normas internacionales” y los impone a las diversas naciones, y a través de sus gigantescos medios de comunicación manipula las realidades.
En tales condiciones, los países integrantes del MNA pueden, a través de su unidad e integridad, poner un alto al unilateralismo de las potencias opresoras.
HispanTV, 30-08-2012
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