La visita de la canciller alemana Angela Merkel a Atenas fue recibida con protestas, pues muchos griegos culpan de su desgracia económica a Alemania, país que lideró la exigencia de severas medidas de austeridad para que la zona euro rescate a Grecia.
La llegada de Merkel ocurre mientras los sindicatos organizan una huelga general de 24 horas, que acatarán dentro de pocos días, además de una paralización de tres horas que realizan hoy.
Por primera vez la policía griega ha prohibido manifestaciones en lugares concretos de Atenas y ha desplazado a más de siete mil policías para cubrir la seguridad durante visita de Angela Merkel.
Grecia, por las nuevas medidas de austeridad afronta en breve miles de despidos de funcionarios públicos y reducción de salarios y pensiones.
Merkel sostuvo una reunión con el primer ministro de Grecia, Antoni Samaras, cuyo gobierno aprobó 9 mil 500 millones de euros en recortes de gastos, la mayor parte de ellos a partir de la reducción de salarios, pensiones y beneficios.
