Cabecilla subversivo pidió perdón

El gobierno de Colombia y el exgrupo subversivo FARC-EP suscribieron un acuerdo de paz en medio del respaldo de la comunidad internacional, en un acto de celebración pública que contó con la participación de mandatarios de países latinoamericanos, incluyendo el presidente peruano Pedro Pablo Kuczinsky, el Secretario General de la ONU y el rey emérito de España Juan Carlos de Borbón.

firma paz Colombia set 2016

Con el pacto se pone fin a 52 años de lucha armada que causó millones de damnificados, más de 260 mil muertos y 50 mil desaparecidos, por la insurrección de las Fuerzas Armadas Revolucionaras de Colombia (FARC), grupo que sembró el terror blandiendo lemas contra la opresión social, pero que se dedicó a respaldar a narcotraficantes y causó gran pobreza en el pueblo colombiano.

En el acto se recordó los esfuerzos para este fin del desaparecido presidente de Venezuela Hugo Chávez y también se conmemoró al escritor colombiano Gabriel García Márquez.

El presidente de Colombia Juan Manuel Santos desea que el acuerdo tenga el respaldo de la ciudadanía de su país, por lo cual convocó a un plebiscito para este domingo 2 de octubre, en el cual los colombianos deberán señalar si aprueban o no este acuerdo.

En la ceremonia el secretario de la ONU Ban Ki-moon manifestó que el organismo que preside continuará ofreciendo apoyo para resolver los asuntos de derechos humanos que aún persisten y dio gracias a Cuba y Noruega por su calidad de países garantes, así como a Venezuela y Chile por acompañar los diálogos. "¡Viva la paz, viva Colombia en paz", exclamó.

El perdón del subversivo

El cabecilla de las FARC-EP, Rodrigo Londoño, conocido como Timoleón Jiménez Timochenko, pidió perdón a todas las víctimas del conflicto “por todo el dolor que hayamos podido causar en esta guerra".

El presidente colombiano Juan Manuel Santos destacó que Cartagena de Indias será recordada como el lugar donde se firmó la paz de Colombia y señaló que "es una declaración del pueblo colombiano ante el mundo de que nos cansamos de la guerra, de que decimos no más guerra". "Les doy a las FARC-EP la bienvenida a la democracia, cambiar las balas por los votos", dijo.

Firmado el acuerdo de paz, se cumplirá un cronograma para la entrega de todas las armas, en 180 días, a la Organización de las Naciones Unidas.