Testamento político del coronel Mu’ammar Qaddafi

En momentos en que las potencias europeas y los EE. UU. someten a intenso e incesante bombardeo aéreo a Libia y ya están empezando a extraer el petróleo en las zonas de ese país en las que los occidentales han impuesto a sus títeres; en momentos en que los países occidentales están disponiendo como si les perteneciesen de las reservas y del oro libio depositados en bancos occidentales (¡fatal error libio!), se ha conocido una carta en que el coronel Mu’ammar Qaddafi expone el carácter colonialista de la agresión que sufre su país y denuncia cómo individuos ambiciosos y serviles han pedido la intervención militar extranjera para destruir su propio país, cerrando los ojos ante el carácter despiadado del sistema capitalista, lo cual se manifiesta —según denuncia Qaddafi y todo el mundo sabe— en que los occidentales no proporcionan a sus pueblos ni vivienda, ni servicios de salud ni educación gratuitas, beneficios que sí existen en Libia.

Ecuador continuará proceso de integración con Perú “gane quien gane”

El Gobierno de Ecuador continuará impulsando el proceso de integración con Perú “gane quien gane las elecciones”, aseguró el presidente Rafael Correa, quien expresó “la mejor de las suertes” a los candidatos Ollanta Humala y Keiko Fujimori, que participarán en la segunda vuelta electoral.

“No voy a cometer el error de inmiscuirme en la política interna de Perú. Espero que el que gane tenga la mejor de las suertes para dirigir al pueblo peruano, pueblo tan querido, y estamos seguros que gane quien gane van a continuar las excelentes relaciones bilaterales que tenemos con Perú”, sostuvo durante una entrevista televisiva.

La demanda de Bolivia por una salida al mar
por Juan Carlos Herrera Tello(*); Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

 
Los 23 de marzo de cada año, el ahora llamado Estado Plurinacional de Bolivia recuerda el combate de Calama y la defensa heroica de Eduardo Abaroa del puente Topater ante el avance de las tropas chilenas que en solo dos días se hicieron de toda la entonces provincia litoral de Bolivia; pero esta celebración se confunde con una aspiración de aquel país para volver a tener un acceso soberano al Océano Pacifico.

Un Estado palestino? ¡Sí, gracias!
Adrián Mac Liman(*)

La espectacular oleada de revueltas que hacen temblar los cimientos de los arcaicos regímenes de Oriente Medio y el Norte de África ha logrado relegar en un segundo, véase tercer plano, los reñidos combates ideológicos que están librando desde hace meses las diplomacias israelí y palestina. Durante las primeras semanas de enero, los medios de comunicación occidentales aún se hacían eco de la imparable ofensiva llevada a cabo por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para lograr el reconocimiento de facto del Estado palestino por los países latinoamericanos. La “operación sonrisa” surtió efecto: tanto Argentina como Brasil, gigantes del continente americano que, dicho sea de paso, cuentan con nutridas comunidades israelitas, optaron por dar luz verde al reconocimiento. Acto seguido, los emisarios de la ANP centraron su interés en algunos Estados de América Central – Honduras, Guatemala y El Salvador – países pequeños, pero muy activos e influyentes en las Naciones Unidas.

Lado oscuro del desastre nuclear del Japón: Armas nucleares

Reproducimos en traducción un artículo en el que, transcurridos los días, se puede entender las razones por las que hasta ahora resulta muy difícil controlar los reactores nucleares japoneses siniestrados. El autor, un periodista japonés, revela el trasfondo histórico y político que fue llevando al Japón al objetivo de desarrollar armas nucleares en secreto (pero con conocimiento y aprobación de los EE. UU.). Esta situación es muy preocupante en Asia, particularmente en China y las dos Coreas, donde por los recuerdos de la invasión japonesa durante la Segunda Guerra Mundial hay una clara oposición al rearme japonés, y con mayor razón si es con armas nucleares.