Cochabamba, la guerra del agua y el cambio climático


Por Amy Goodman


COCHABAMBA, Bolivia— En esta pequeña nación andina de diez millones de habitantes, los glaciares están sufriendo el deshielo, amenazando el suministro de agua de la mayor zona urbana del país, El Alto y La Paz, con tres millones y medio de personas que viven a más de tres mil metros de altura. Viajé desde el Aeropuerto Internacional El Alto, el aeropuerto comercial más alto del mundo, a la ciudad de Cochabamba.

Evo Morales culpa al consumo de pollo por la homosexualidad

El presidente boliviano Evo Morales aseguró que las desviaciones de los hombres son consecuencia del consumo de pollos cargados con hormonas femeninas, lo cual causó la hilaridad de su auditorio.


Manifestó que por culpa de los pollos y del ganado vacuno criado con hormonas las niñas también tienen un desarrollo prematuro del busto y que desde que conoce esa información, rechaza los pollos de granja para alimentarse exclusivamente con animales "criollos", libres de los transgénicos.

De aquellos polvos, estos lodos

Por Xavier Caño Tamayo*


El magistrado español Baltasar Garzón (conocido por su implacable trabajo como juez instructor contra terroristas, narcotraficantes, criminales de guerra y grandes estafadores) fue denunciado por dos asociaciones franquistas: la ultraderechista 'Manos Limpias' y Falange Española, el partido fascista español. Acusado de prevaricar por investigar la desaparición de docenas de miles de españoles durante la guerra civil y la dictadura, a petición de familiares y asociaciones de víctimas del franquismo, así como las responsabilidades franquistas en esos crímenes contra la humanidad.

Rumanos traficantes de niños los mutilaban para que pidan limosnas

Uno de los palacios construidos con el dinero del tráfico humano en Rumania.
Fue desarticulada una banda de las más escabrosa del hampa internacional. La policía rumana una banda de 30 delincuentes que recurría hasta la mutilación para que den lástima y obtengan más limosnas en las calles del Reino Unido.

El desastre de Massey Energy no fue sólo una tragedia, también fue un crimen

Por Amy Goodman


La compañía minera Massey Energy opera la mina de carbón Upper Big Branch (UBB, por sus siglas en inglés) de Virginia Occidental en la que veintinueve mineros murieron la semana pasada. Perder la vida es trágico, pero la explosión en UBB es más que una tragedia, es un crimen. Sin embargo, cuando una corporación es culpable de algún crimen no va a la cárcel, ni pierde su libertad, solamente paga una multa —lo que con frecuencia equivale a un tirón de orejas, el precio a pagar por hacer negocios.— Nadie ha demostrado esto con tanta claridad como el Director General de Massey Energy, Don Blankenship. Durante años, Blankenship ha sido el dolor de cabeza de los activistas contra el cambio climático y los defensores de la seguridad en las minas. Este último desastre minero, como mínimo, debería servir para atraer la atención sobre el tema de las grandes inversiones destructivas que pisotean a las comunidades y los derechos del medio ambiente y los trabajadores.