A esta conclusión llegó una comisión de la ONU tras examinar el uso de la fuerza por parte de Israel y sus operaciones militares y policiales en Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, desde mayo de 2021 hasta agosto de 2023.
La Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre el Territorio Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental e Israel, presentó este 16 de octubre a la Asamblea General lo que llamó un “doloroso y oportuno” informe. Completado antes de que comenzara la última escalada del conflicto palestino-israelí, examina el uso de la fuerza por parte de Israel y las autoridades de facto en Gaza, así como las operaciones militares y policiales israelíes en Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental y partes de Israel, en el período comprendido entre mayo de 2021 y agosto de 2023.