El trabajo comprende una muestra de 900 mil niños nacidos entre 1973 y 1983, donde encontraron que aquellos que habían obtenido nota E (la más baja) en alguna etapa mostraban el doble de riesgo de desarrollar esquizofrenia.
Los pacientes con esquizofrenia se caracterizan por escuchar voces y experimentar delusiones (conceptos o imágenes fuera de la realidad) paranoides, que por lo general afloran al final de la adolescencia o alrededor de los 20 años de edad.
El equipo, del Instituto Karolinska de Estocolmo y del Instituto de Psiquiatría del King's College London observaron que en Suecia los registros de pacientes con esquizofrenia se producen a los15 ó 16 años, mientras que los pacientes con desórdenes psicóticos, incluyendo esquizofrenia, se producen después de los 17 años.
En Suecia se han sistematizado los registros nacionales, de modo que cada paciente tiene un código de identificación, para poder comparar los datos.
En el caso de adultos se produce siete diagnósticos de esquizofrenia por cada 100 mil personas por año.
Los especialistas determinaron que las personas con pobre rendimiento escolar tenían cuatro veces más posibilidades de desarrollar esquizofrenia en la adultez.
La falta de atención y compromiso en su formación, los problemas de memoria y otros, como la creatividad la diligencia y las habilidades sociales juegan un papel en el desarrollo de este mal.
Un pobre desenvolvimiento escolar no causa esquizofrenia ni indica quiénes de la escuela la padecerán, pero es un indicador de una anormalidad que se evidencia varios años antes del diagnóstico, el cual puede ser de mucha utilidad, por lo que el rendimiento escolar no sólo debe ser visto como una prueba de inteligencia.
Los problemas de concentración y estrés mental pueden interferir con el estudio y pueden ser signos tempranos de enfermedad mental. Las personas del estudio podrían tener inteligencia normal, pero comenzaron a padecer síntomas que interfirieron con su educación.
Otros estudios indican una relación entre la esquizofrenia y problemas tempranos de aprendizaje y comprensión.
No obstante, señalan que también existen probablemente otros factores, y que también se han presentado casos de esquizofrenia en escolares con alto rendimiento.