Manchas, arrugas, aparición de lunares, variadas alteraciones oculares hasta cáncer de piel
El exceso de sol sin protección puede tener efectos muy nocivos. Las consecuencias más reconocidas a largo plazo son la aparición de manchas y arrugas, aparición de lunares, variadas alteraciones oculares hasta cáncer de piel, indicó el Dr. Mauricio León Rivera, director médico del Centro Detector del Cáncer y cirujano oncólogo de la Clínica Ricardo Palma.
Recalcó que, durante el verano, la piel se encuentra más expuesta a los rayos ultravioleta, especialmente en los picos más elevados entre las once de la mañana a las tres de la tarde, horarios donde son más fuertes y hacen más daño.
Señaló que cuando se llevan a cabo actividades al aire libre se debe utilizar ropa de algodón holgada y si es de color oscuro, mejor, ya que son las que más protegen del sol, sombreros de ala ancha y anteojos de sol con protección ultravioleta.
Además, recomendó utilizar protector solar mayor o igual a 35 FPS (Factor de Protección Solar) aplicándolo media hora antes de la exposición al sol y renovándolo cada dos horas o luego del baño o de hacer ejercicio, evitar la exposición solar de bebés menores de un año y elegir lugares con sombra.
Aclaró que los medios artificiales de radiación para tomar color en la piel son igualmente malos, las dosis de UV artificiales se suman a las dosis de UV del sol y refuerzan el efecto cancerígeno.
El especialista resaltó que, el 15% de casos de cáncer de piel proviene de lesiones o lunares que degeneraron por la peligrosa radiación ultravioleta (UV- B).