Los vacunados también pueden propagar la variante delta del SARS-CoV-2, igual de contagiosa que el sarampión o la varicela, por lo que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC) insistirán en retomar el uso de la mascarilla en interiores, según varios medios estadounidenses.
The Washington Post fue el primero en acceder a una presentación interna en la que el organismo reconoce que "la guerra ha cambiado" y que la variante delta salta de una persona a otra más rápido que los virus del ébola o del resfriado común.
La directora de CDC, Rochelle Walensky, confirmó en declaraciones a la cadena de televisión CNN la autenticidad del documento que, según se espera, será divulgado este viernes.
"La gente necesita entender que no somos alarmistas. La cosa va en serio. Es uno de los virus más transmisibles que conocemos. El sarampión, la varicela, este, son todos iguales", dijo.
Como promedio, cada persona infectada con la variante delta transmite el virus a otras ocho o nueve. El linaje original era tan transmisible como el resfriado común, y cada infectado contagiaba a dos personas más como promedio.
Walensky advirtió que "las medidas que se necesitan para controlarlo son extremas".
Entre otras cosas, se recomienda que todo el mundo, incluidas las personas ya vacunadas, usen las mascarillas en los interiores con un alto nivel de transmisión del virus.
Las vacunas reducen el riesgo de enfermedad grave o muerte en más del 90 por ciento, pero el de infección, en un 66,7 por ciento, por lo que la variante delta va cobrando más difusión comunitaria a pesar de las campañas de inmunización.
Con información de Sputnik