Lo advertimos: saquearon durante evacuación por tsunami
No se necesita ser adivinos. El ministro del Interior y el jefe de Defensa Civil deberían ser despedidos por incapacidad, pues son responsables de los saqueos que se produjeron durante la evacuación por el tsunami en las costas peruanas.
No se necesita ser adivinos. El ministro del Interior y el jefe de Defensa Civil deberían ser despedidos por incapacidad, pues son responsables de los saqueos que se produjeron durante la evacuación por el tsunami en las costas peruanas.
Por la mañana de ayer, Luis Palomino, jefe de Defensa Civil, una institución que cuesta caro a todos los peruanos porque gozan de una planilla dorada financiada con fondos del PNUD, apareció a lucirse en conferencia de prensa anunciando las medidas que tomarían en previsión, pero en ningún momento mencionó cuántos policías serían movilizados y si contarían con personal del ejercito en las tareas de brindar seguridad a la población (ver Alerta de tsunami: que boten a jefe de Indeci y al ministro del Interior) .
Así, el par de incapaces, el ministro de lnterior Miguel Hidalgo y el Jefe del Indeci, Luis Palomino, son los responsables de los actos de pillaje ocurridos. En todo caso, si no hay suficientes policías, ¿por qué no solicitaron personal del Ejército? Si existe la capacidadlogística,¿por quése permite que el hampa azote a la gente? Esto es muy grave, pues de haber un nuevo desastre estamos a merced de autoridades incapaces de prevenir lo obvio.
Así, el par de incapaces, el ministro de lnterior Miguel Hidalgo y el Jefe del Indeci, Luis Palomino, son los responsables de los actos de pillaje ocurridos. En todo caso, si no hay suficientes policías, ¿por qué no solicitaron personal del Ejército? Si existe la capacidadlogística,¿por quése permite que el hampa azote a la gente? Esto es muy grave, pues de haber un nuevo desastre estamos a merced de autoridades incapaces de prevenir lo obvio.
Sin embargo, la gran prensa no informó sobre estos hechos. Uno de los pocos (o el único) fue el Diario 16:
Se registraron saqueos durante evacuación
Doce horas antes de la alerta del tsunami, la población comenzó a evacuar el litoral peruano con dirección a zonas de buen recaudo designados y a las viviendas de sus familiares más cercanos, pese a que el efecto de la naturaleza no iba a ser de grandes magnitudes como lo fue en Japón. Es más, inescrupulosos y delincuentes aprovecharon la situación para generar caos, pero sobre todo, para robar y hasta saquear las viviendas y negocios de la zonas afectadas aprovechando la ausencia de sus propietarios.
Esta situación se registró a lo largo de todas las ciudades costeras debido a que Defensa Civil y la policía determinaron que el desplazamiento de la población comience a las 4 de la tarde, aunque muchos lo hicieron desde la mañana. Por ejemplo, los habitantes del Callao, Bellavista y La Punta, fueron evacuados al Parque Zonal de Yawarhuaca y al Hospital “Daniel Alcides Carrión”.
En tanto, los pobladores de Ventanilla fueron trasladados al Estadio “Mi Perú”. Y como la Costa Verde fue cerrada, los restaurantes y centros de diversión solo atendieron hasta las 3 de la tarde. El ministerio de Salud decretó la Alerta Amarilla en Lima y el Callao, y por disposición del Ministerio de Educación se suspendieron las clases en todo el litoral. En el Callao los colegios nacionales “Dos de Mayo”, “Abraham Lincoln” y “Clara Cogorno de Cogorno”, cercanos al mar, también adoptaron la medida.
La fe también estuvo presente en esta evacuación. Muchas personas se trasladaron a la Iglesia de Santa Rosa del Callao, a pedir al Señor del Mar que no ocurra ningún desastre. Los moradores de Sarita Colonia rogaron para que tampoco los afecte.
Al mediodía los buques, fragatas y flotas de la Marina de Guerra del Perú fueron desplazados a más de 100 metros de su ubicación para evitar cualquier desastre. Las lanchas y yates particulares y de turismo dejaron de ofrecer sus servicios.
Los pescadores afirmaron que en horas de la madrugada la marea se elevó, y que la pesca aumentó considerablemente. Pero por temor a que la marea se eleve a más de un metro, decidieron retirarse y varar sus pequeñas embarcaciones a la orilla.
En los balnearios del sur el desplazamiento comenzó a las 5.30 de la tarde. Vecinos de la Urbanización Los Cedros de Chorrillos informaron que el mar se retiró dos metros hacia dentro lo que provocó no solo el éxodo sino el temor. En el balneario y el boulevard de Asia, las actividades comerciales se suspendieron y los espectáculos artísticos por 24 horas, entre ellos la del DJ Tiesto y hasta el homenaje al reconocido guitarrista Oscar Avilés.
En San Bartolo, los vecinos acordaron alejarse dos kilómetros de la playa, y en Puerto Viejo los ladrones aprovecharon la evacuación para saquear las casas. Lo peor es que los buses que se dirigen al sur hicieron su agosto porque cobraron hasta 50 soles para ir a Chincha o Ica. Al parecer no quisieron hacer caso a la orden del Organismo Supervisor de la Infraestructura de Transporte (Ositran) que había suspendido la salida de los buses al sur y al norte. La zona turística de Paracas fue evacuada desde las 2 de la tarde.
En el norte la población de Ancón ignoraba lo que es un tsunami, pues muchos se acercaron a la playa como espectadores. Los chimbotanos se trasladaron al terminal terrestre, el estadio y el mercado mayorista. 30 mil pobladores de los balnearios de Huanchaco se trasladaron al centro de Trujillo. En Máncora las autoridades se encargaron de la evacuación mediante el perifoneo. En Tumbes, por ser la primera zona en llegar la ola del tsunami, las autoridades llevaron a los pobladores de Canoas, Punta Sal y Puerto Pizarro, La Cruz, hacia los arenales.
Se registraron saqueos durante evacuación
Doce horas antes de la alerta del tsunami, la población comenzó a evacuar el litoral peruano con dirección a zonas de buen recaudo designados y a las viviendas de sus familiares más cercanos, pese a que el efecto de la naturaleza no iba a ser de grandes magnitudes como lo fue en Japón. Es más, inescrupulosos y delincuentes aprovecharon la situación para generar caos, pero sobre todo, para robar y hasta saquear las viviendas y negocios de la zonas afectadas aprovechando la ausencia de sus propietarios.
Esta situación se registró a lo largo de todas las ciudades costeras debido a que Defensa Civil y la policía determinaron que el desplazamiento de la población comience a las 4 de la tarde, aunque muchos lo hicieron desde la mañana. Por ejemplo, los habitantes del Callao, Bellavista y La Punta, fueron evacuados al Parque Zonal de Yawarhuaca y al Hospital “Daniel Alcides Carrión”.
En tanto, los pobladores de Ventanilla fueron trasladados al Estadio “Mi Perú”. Y como la Costa Verde fue cerrada, los restaurantes y centros de diversión solo atendieron hasta las 3 de la tarde. El ministerio de Salud decretó la Alerta Amarilla en Lima y el Callao, y por disposición del Ministerio de Educación se suspendieron las clases en todo el litoral. En el Callao los colegios nacionales “Dos de Mayo”, “Abraham Lincoln” y “Clara Cogorno de Cogorno”, cercanos al mar, también adoptaron la medida.
La fe también estuvo presente en esta evacuación. Muchas personas se trasladaron a la Iglesia de Santa Rosa del Callao, a pedir al Señor del Mar que no ocurra ningún desastre. Los moradores de Sarita Colonia rogaron para que tampoco los afecte.
Al mediodía los buques, fragatas y flotas de la Marina de Guerra del Perú fueron desplazados a más de 100 metros de su ubicación para evitar cualquier desastre. Las lanchas y yates particulares y de turismo dejaron de ofrecer sus servicios.
Los pescadores afirmaron que en horas de la madrugada la marea se elevó, y que la pesca aumentó considerablemente. Pero por temor a que la marea se eleve a más de un metro, decidieron retirarse y varar sus pequeñas embarcaciones a la orilla.
En los balnearios del sur el desplazamiento comenzó a las 5.30 de la tarde. Vecinos de la Urbanización Los Cedros de Chorrillos informaron que el mar se retiró dos metros hacia dentro lo que provocó no solo el éxodo sino el temor. En el balneario y el boulevard de Asia, las actividades comerciales se suspendieron y los espectáculos artísticos por 24 horas, entre ellos la del DJ Tiesto y hasta el homenaje al reconocido guitarrista Oscar Avilés.
En San Bartolo, los vecinos acordaron alejarse dos kilómetros de la playa, y en Puerto Viejo los ladrones aprovecharon la evacuación para saquear las casas. Lo peor es que los buses que se dirigen al sur hicieron su agosto porque cobraron hasta 50 soles para ir a Chincha o Ica. Al parecer no quisieron hacer caso a la orden del Organismo Supervisor de la Infraestructura de Transporte (Ositran) que había suspendido la salida de los buses al sur y al norte. La zona turística de Paracas fue evacuada desde las 2 de la tarde.
En el norte la población de Ancón ignoraba lo que es un tsunami, pues muchos se acercaron a la playa como espectadores. Los chimbotanos se trasladaron al terminal terrestre, el estadio y el mercado mayorista. 30 mil pobladores de los balnearios de Huanchaco se trasladaron al centro de Trujillo. En Máncora las autoridades se encargaron de la evacuación mediante el perifoneo. En Tumbes, por ser la primera zona en llegar la ola del tsunami, las autoridades llevaron a los pobladores de Canoas, Punta Sal y Puerto Pizarro, La Cruz, hacia los arenales.
