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Ante los audios comprometedores, Hernán Garrido Lecca, ministro de Salud, no tuvo más remedio que admitir que se reunió con el mafioso Fortunato Canaán en al menos tres oportunidades, como lo señala el prófugo Rómulo León.
En el programa de anoche de Rosa María Palacios, Garrido Lecca trató de imponer su presencia, pues había llegado hasta el Canal 4 pidiendo intervenir en el programa, como si fuese el dueño del canal. La conductora no lo recibió y explicó que para entrevistar a un invitado debe preparar la entrevista.
Según declaró al diario Correo, Garrido Lecca acepta haberse reunido, pero niega haberse involucrado en algún acto de corrupción. "Recibí una sola vez al señor Canaán en febrero de este año, porque él me buscó en mi despacho y además porque el ex ministro Carlos Vallejos me pidió que lo recibiera", manifestó.
Pero el ministro admitió que hubo más reuniones con Canaán, quien se presentó como representante de Fortluk Medic, dedicada a la construcción de hospitales en diversos países.
En el audio se escucha decir que los hospitales por construir serán para apoyar la campaña presidencial de Jorge Del Castillo y que Canaán debía reunirse con Garrido Lecca. Se entiende que la construcción de hospitales rendiría beneficios destinados a la campaña, además de que los hospitales servirían para promover sus fotografías y emplearlos de manera política.
Garrido Lecca contrató a la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para licitar la construcción de tres nosocomios, el Hospital del Niño, Hospital Socorro y el Hospital San Juan de Dios de Pisco. Resulta sospechoso que se contrate a una empresa para licitar, ¿acaso no hay profesionales peruanos que puedan conducir una licitación?
OEIotorgó la buena pro a la española BM3 Obras y Servicios Sociedad Anónima, que sospechosamente también ha ganado la buena pro para los hospitales Luis Negreiros y el Instituto del Corazón. Canaán es lobbista de BM3 Obras y Servicios SA, según La Primera.
Ahora el Ministerio de Salud rechaza haber adjudicado proyectos de inversión a empresas o consorcios vinculados a Fortunato Canaán, así señala que Fortuk Medic no tiene vinculación alguna con la construcción del Nuevo Instituto de Salud del Niño, lo cual también lo niega la empresa.
Resulta también sospechoso que Carlos Vallejos, amigo íntimo del Presidente, tenga que recomendar una reunión con Canaán, pues sería indicativo de “arreglos” previos a las licitaciones. ¿Por qué las empresas no esperan la publicación de la oferta de licitación para postular? ¿Acaso es porque tienen que “conversar” para hacerse favorecer desde el proceso de elaboración de las bases de la licitación?
Si no es con Canaán, los indicios de corrupción y de “arreglo previo” son claros y serían una práctica generalizada en todas las licitaciones no sólo de Salud o Energía y Minas, sino de todo el gobierno, hasta en Essalud.
Sí resulta evidente que estos hospitales que se están construyendo están sirviendo para una campaña de propaganda del gobierno, la cual enriquece a los medios de comunicación televisivos, radiales y de prensa escrita, que reciben millones por el pago de publicidad.
Inclusive en Essalud, Barrios coloca posters promoviendo a Alan García, empleando el dinero de los asegurado y realiza propaganda sobre los hospitales.
Hasta el momento el Congreso habla mucho, pero es incapaz de frenar el derroche publicitario mediante una norma que regule que se gaste estrictamente en lo necesario, es decir, en campañas de educativas e informativas en beneficio de la población.
