La revista Caretas publicó hoy en portada una foto que muestra al congresista de Perú Posible José León (uno de los principales escuderos del gobierno humalista) en la puerta de su casa en Huanchaco, conversando con el narcotraficante mexicano Rodrigo Torres.
León había declarado que arrendó su casas a una mujer que “no tenía antecedentes”, Lucía Villavicencio Ruiz, pero, según la Policía, esta mujer sería la persona que limpiaba la residencia de Huanchaco, mientras que el narco era un subarrendatario, elo cual hace más sospechoso el encuentro de León con un subarrendatario.
En declaraciones a RPP, León dice que conversó con Torres para desocupar la vivienda, explicación que no convence. ¿por qué no conversó con Villavicencio para ello? León tampoco explicó por qué conversó hora y media con el narco y por qué después viajó a México.
El caso está relacionado a la incautación de 7.6 toneladas de droga en Trujillo, el cargamento más grande en los registros policiales del Perú.
El ministro de Agricultura, José León Rivera, fue involucrado en un caso de proxenetismo cuando un programa televisivo mostró que en un hotel de propiedad de su familia, se ofrecen los servicios sexuales de mujeres, algunas de ellas menores de edad.
Según sus declaraciones, León no tiene bienes,cuatro inmuebles, los cuales están registrado a nombre de su esposa bajo régimen de separación de bienes.
Sospechosa coincidencia, casos delictivos relacionados con Leon: prostitución
Como se recuerda, León también fue relacionado con un escándalo de prostitución cuando fue ministro de Agricultura del gobierno de Alejandro Toledo.
El programa "Cuarto Poder" difundió un reportaje donde un hotel registrado a nombre de su hijo servía de casa de meretricio, era el lujoso Hotel "Villa del Mar", ubicado cerca al balneario trujillano de Huanchaco, donde también se ubica la vivienda del caso de narcotráfico.
Entonces, León se libró de las acusaciones diciendo que el hotel no es de él, sino de su hijo, y culpó a los trabajadores de acoger la prostitución, incluso de menores de edad.
Sospechosamente, su hijo, Cristhian León, ingeniero industrial esa vez de 25 años, inició el negocio cuando tenía a 22 años.
Una vez más se comprueba que cuando políticos apestan a corrupción, delito o prostitución, sus partidos “no sienten” el fétido hedor.
Hace poco, el secretario de Perú Posible Luis Thais, se expresó evidenciando tenerle sin cuidado los antecedentes de León. Cuando se le emplazó en RPP sobre el caso de prostitución dijo: “¿y sigue teniendo esa casa?”. Por lo visto, no les interesa el pasado ni el presente.
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