El presidente Ollanta Humala continuó defendiendo el absuivo nuevo régimen laboral juvenil, que recorta importantes derechos a los jóvenes y aduce que desea evitar que los jóvenes sean víctimas de malas prácticas laborales, sobreexplotación y que paguen "derecho de piso".
Argumentó que busca equilibrio para que estos jóvenes salgan de la “informalidad, de la sobreexplotación, de las malas prácticas laborales como el llamado ‘derecho de piso’, que hay que abolirlo. Necesitamos darle capacitaciones a estos jóvenes y debemos tener como aliados a pymes”, dijo.
Pese a ser evidente el recorte de derechos, como lo señala la ley 30288, dijo que la norma “no se ha hecho para quitarle algo alguien, a todos los que tienen algo se les va a preservar, esto es para darle algo a quienes no tienen nada. Al margen de opiniones que puedan darse, esta norma es un paso importante, un paso valiente”, señaló.
Cuestionó a los partidos por aprobar en un inicio y luego retractarse de su respaldo a esta ley y aseguró sentirse “frustrado” por la forma cómo cambian después de votar en el Congreso, pero cuando ven que el viento va por otro lado, “giran como una veleta”.
“El pueblo valora a los políticos que tienen convicciones y desprecia a quienes no la tienen, a los que simplemente están haciendo el cálculo político, a esos que dicen una cosa en un momento y después dicen lo contrario. El pueblo toma nota, el pueblo no olvida”, dijo.
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