Poco les importa legislar en favor de la niñez, el ambiente, la educación, la ciencia, etc. En su demencial desenfreno por blindarse pisotean las prioridades del país
Confirmando la tesis de la Fiscalía que dentro del fujimorismo existiría una organización criminal que busca el poder para sus fines delictivos, en el Congreso, donde tienen mayoría, una vez más aprobaron una norma para favorecer el delito, como siempre, sostenidos por los apristas.
Esta aprobación es grave, pues atenta contra la lucha contra la corrupción que tanto perjuicio y atraso ha traído al Perú porque los partidos reciben sobornos por adelantado para, en caso de ganar las elecciones, favorecer a las empresas corruptoras con licitaciones pactadas en contratos que significan serio perjuicio para el país y ganancias de saqueo para los empresarios delincuenciales coludidos con los partidos políticos.
Esta mayoría aprobó modificar la legislación sobre financiamiento ilegal y su objetivo no sólo es futuro, sino que buscan que quienes hayan ya delinquido con esta tipificación, antes de la promulgación de esta modificación, ganen menores penas. Como se sabe, tanto cabecillos y secuaces de Fuerza Popular y del Partido Aprista son objeto de investigaciones judiciales.
Lo aprobado pretende modificar del delito de financiamiento ilícito a partidos en el Código Penal, zurrándose en el referéndum del domingo, donde la ciudadanía manifestará su voluntad.
La modificación establece que quien, infringiendo la ley electoral o de organizaciones políticas, entrega o recibe, directa o indirectamente, financiamiento de origen delictivo, es reprimido con pena privativa de libertad no menor de tres ni mayor de diez años.
“La pena privativa de libertad es no menos de cinco años ni mayor de quince años y de 120 a 350 días multa si el valor del dinero, bienes, efectos, o ganancias involucrados es superior al equivalente a 500 UIT”, dice la norma, lo cual equivale a S/ 2'075.000.
Abren la puerta a la burla
Además de reducir las sanciones, borran modalidades de perpetrar estos delitos, como el conocido “pitufeo”, esto es, el fraccionamiento de grandes aportes un muchas pequeñas cantidades, para no levantar sospechas.
Poco importaron las objeciones de los partidos de oposición a la forma (del trámite) y el fondo de la modificación. Abusando de su mayoría, sin ninguna vergüenza pasaron sobre todos para conseguir la aprobación en tiempo récord.
Peruanos Por el Kambio, furgón de cola del fujiaprismo
Días antes, Peruanos por el Kambio (PPK) y Alianza para el Progreso retiraron sus firmas, con lo cual no se pudo ampliar, pero pese a esto, PPK se subió al carro de la impunidad fujiaprista avalando la modificación.
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