Una investigación más, además de “Los dinámicos del centro”. La Procuraduría Anticorrupción de Junín denunció al jefe de Perú Libre, Vladimir Cerrón, por el delito contra la administración pública en la modalidad de peculado, por el resguardo policial irregular que recibió por parte de un agente.

 

Vladimir Cerron 2

 

Están incluidos también en la denuncia Fernando Orihuela Rojas, gobernador regional de Junín, y Carlos Wilfredo Zárrate Villalobos, suboficial brigadier PNP.

Además, Nora Flores, procuradora anticorrupción, denunció a Vladimir Cerrón, Fernando Orihuela y familiares del mencionado suboficial de la PNP por la presunta comisión del delito contra la administración pública en la modalidad de colusión.

La presunta colusión está referida a los contratos del Gobierno Regional de Junín, Cusco y Huancavelica con empresas ligadas a familiares de Carlos Zárate por más de 25 millones de soles.

La Procuraduría solicita a la Fiscalía abrir una investigación preliminar contra los implicados y realizar actos indagatorios como tomar declaración de Vladimir Cerrón y pedir el levantamiento de su secreto bancario y secreto de comunicaciones.

Asilo

El abogado de Vladimir Cerrón, Raúl Noblecilla, comentando estas investigaciones, ya planta que ante lo que llama una “persecución política”, “nunca se puede descartar” el pedido de asilo, según dijo a Sudaca.pe.

“En una situación como la que vivimos, sería absurdo y necio decir que eso no lo haríamos. Queremos contribuir con la investigación, pero necesitamos estar en las mismas condiciones con la defensa”, declaró.

“El doctor Vladimir Cerrón, en una defensa donde se considera que existe una grave presión política y económica, tiene que considerar cualquier escenario y el asilo político es una solución ante lo que se podría convertir en una persecución política”, aseguró.

Así las cosas, plantear el asilo apunta a que Vladimir Cerrón no sólo se siente culpable, sino que ha entendido que su defensa o maniobras ante las justicia no darán resultado y finalmente terminaría en la cárcel. El asilo en los corruptos es siempre una opción empleada para sorprender a gobiernos extranjeros no enterados de los antecedentes quienes alegan persecusión política.