Bachelet se burla de denuncia peruana de espionaje
Ante la denuncia del gobierno peruano del espionaje perpetrado por Chile a través de la compra del espía peruano Víctor Ariza, Michelle Bachelet pretende jugar a estirar el tiempo para que el asunto caiga en el olvido y añade burlona: "no hay resultados concretos.
Ante la denuncia del gobierno peruano del espionaje perpetrado por Chile a través de la compra del espía peruano Víctor Ariza, Michelle Bachelet pretende jugar a estirar el tiempo para que el asunto caiga en el olvido y añade burlona: "no hay resultados concretos.
Pese a las pruebas contundentes, que incluyen pruebas del envío mensual de dinero al espía, Chile dice que no encuentra datos concretos que permitan confirmar la denuncia peruana de espionaje, según dijo Bachelet.
"La verdad es que, hasta ahora, lo que hemos podido aventurar, de mirar, no tenemos resultados concretos que nos orienten a ningún resultado claro sobre los antecedentes y por lo tanto vamos a seguir con un estudio más profundo", señaló Bachelet, quien tiene antecedentes de espionaje con asalto realizado contra Argentina cuando era ministra de Defensa.
"Frente al hecho denunciado por Perú nosotros hemos señalado con claridad que vamos a investigar, estudiar las evidencias si es que existe algo que corresponda y por cierto se tomarán las decisiones de acuerdo a lo que aparezca de esto", manifestó Bachelet sin mencionar el excesivo tiempo que está tardando Chile en dar respuesta a la denuncia peruana.
Tal vez temerosa de que el Perú denuncie el TLC con Chile, que sólo perjudica al Perú y favorece a Chile, en los últimos días Bachelet ensaya poses pacifistas, pero continúa su desenfrenada carrera armamentista. Bachelet tampoco tiene la dignidad de retirar a su embajador en Lima, siendo que el Perú llamó a su embajador en Santiago.
Es previsible que Chile finalmente niegue el espionaje, pues en el exterior realiza una campaña grandilocuente vendiendo una imagen de Chile como si fuese un país civilizado, para maquillar el hecho de ser un país violador contumaz de los tratados internacionales y ladrón de territorios y denominaciones de origen, como el pisco y otros.
"La verdad es que, hasta ahora, lo que hemos podido aventurar, de mirar, no tenemos resultados concretos que nos orienten a ningún resultado claro sobre los antecedentes y por lo tanto vamos a seguir con un estudio más profundo", señaló Bachelet, quien tiene antecedentes de espionaje con asalto realizado contra Argentina cuando era ministra de Defensa.
"Frente al hecho denunciado por Perú nosotros hemos señalado con claridad que vamos a investigar, estudiar las evidencias si es que existe algo que corresponda y por cierto se tomarán las decisiones de acuerdo a lo que aparezca de esto", manifestó Bachelet sin mencionar el excesivo tiempo que está tardando Chile en dar respuesta a la denuncia peruana.
Tal vez temerosa de que el Perú denuncie el TLC con Chile, que sólo perjudica al Perú y favorece a Chile, en los últimos días Bachelet ensaya poses pacifistas, pero continúa su desenfrenada carrera armamentista. Bachelet tampoco tiene la dignidad de retirar a su embajador en Lima, siendo que el Perú llamó a su embajador en Santiago.
Es previsible que Chile finalmente niegue el espionaje, pues en el exterior realiza una campaña grandilocuente vendiendo una imagen de Chile como si fuese un país civilizado, para maquillar el hecho de ser un país violador contumaz de los tratados internacionales y ladrón de territorios y denominaciones de origen, como el pisco y otros.