Un ataque rebelde despoja a indígenas colombianos amenazados de sus medicinas de emergencia
Rebeldes armados de Colombia han secuestrado el primer intento de proporcionar asistencia médica por barco al pueblo indígena nómada nukak, en Colombia, que se encuentra al borde de la extinción.
Survival International ha sabido que el personal médico fue obligado a abandonar todos sus suministros, entre los que había camillas, material quirúrgico y ordenadores.
La Organización Nacional Indígena ONIC, a la que pertenece el barco robado, ha informado a Survival de cómo se produjo el ataque. Miembros de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) dieron a las personas que se encontraban a bordo veinte minutos para huir.
Este incidente supone un terrible golpe para los indígenas nukaks, que tienen poco o ningún acceso a la atención sanitaria. El mes pasado Naciones Unidas incluyó a este pueblo indígena entre los 35 grupos en peligro inminente de extinción que hay en Colombia.
El director de Survival, Stephen Corry, ha declarado hoy: "La interminable guerra civil que se vive en Colombia ha traído muerte y destrucción a los nukaks. Para los miembros nómadas de este pueblo supone el desastre absoluto. El secuestro de este barco les niega su única fuente de cuidado médico. Parece cruel e injusto que una parte inocente en el conflicto sea la que está sufriendo más".
Los nukaks nómadas se trasladan por su selva con frecuencia, a pesar de los peligros que entrañan los insurgentes de la guerrilla, que cultivan coca en el sur de la Amazonia. Pero otros se han visto obligados a trasladarse a asentamientos en las afueras de las ciudades, demasiado atemorizados como para volver a la selva.