Puesta en valor de huaca Huantille
La Dirección de Arqueología del Ministerio de Cultura puso en marcha el “Proyecto de Investigación, Conservación y Puesta en Valor del Sitio Arqueológico Huaca Huantille”, ubicado en el distrito limeño de la Magdalena del Mar, ante la necesidad de proseguir con las excavaciones y ponerlo al servicio de la comunidad, como eje integrador de la identidad cultural local.
Los trabajos y las investigaciones que se iniciaron en el año 2007, tras el desalojo de más de 50 familias que se instalaron en el lugar, han permitido la excavación de 4,000 m2 de los 7,000 m2 que tiene la parte nuclear del sitio arqueológico, es decir el 57% del monumento.
Mientras que para la temporada 2011-2012, se ha propuesto la excavación de los 3,000 m2 restantes del monumento, merced a un Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional suscrito entre el Ministerio de Cultura y la Municipalidad Distrital de Magdalena del Mar, el 8 de junio del año pasado.
Invasión de Huantille
Se tiene registros que entre 1941 y 1944, la Huaca Huantille era explotada con fines industriales que debido a cortes ilegales e inundaciones, destruían paulatinamente sus estructuras, así como el cementerio con gran cantidad de fardos funerarios ubicado en sus contornos.
En 1968, la huaca fue recortada en el lado sur por la Junta Nacional de Vivienda para la construcción de un mercado y un conjunto habitacional, continuado desde esa época una lenta y progresiva depredación tanto de autoridades ediles como de los pobladores, a punto que uno de los alcaldes de Magdalena del Mar, planteo su demolición con el propósito de levantar un centro cívico.
Sin embargo, en 1987, se realiza el cercado de la zona arqueológica, no considerándose reubicar a los invasores asentados desde la década de los 60, y quienes contaban con los servicios básicos, como agua potable, electricidad, teléfono y TV cable.
El desalojo de Huantille duró tres días. Se realizó en abril del 2006, luego de que el municipio lograra, mediante el diálogo, que los invasores se retiraran pacíficamente, dejando en su partida más de 100 toneladas de basura, desmonte y material en desuso. El complejo arqueológico era considerado zona roja por la venta clandestina de droga y los robos constantes.
Los principales daños que sufrió la huaca, aparte del recorte del sitio, son la alteración de las estructuras y del cerco perimétrico, erosión basal (pérdida de material en la base), fisuras y quema de desechos que alteraron las paredes.
Proyecto Huantille
La implementación del proyecto se dio con la finalidad de recuperar la prestancia del monumento arqueológico afectado durante años por el abandono y destrucción sistemática debido a la expansión urbana, mediante la limpieza, excavación arqueológica y conservación, para luego dejarla expedita para su inclusión dentro del circuito cultural, recreativo y turístico local.
El caso de Huantille sería muy similar a otros sitios arqueológicos, sentenciado a perecer por la inacción de las autoridades políticas y el desinterés de los vecinos, si es que no hubiera habido un cambio en la visión de las autoridades edilicias actuales, quienes lograron desalojar a las familias invasoras y posteriormente facilitaron los trabajos arqueológicos con el apoyo del Ministerio de Cultura, con fines de puesta en valor.
Complejo Arqueológico
Huaca Huantille está compuesta por una serie de recintos estructurados y comunicados entre sí por accesos diferenciados. Tiene como eje arquitectónico, una plaza central con banquetas a los costados en forma de L, la misma que se comunicaba con el exterior mediante una gran escalinata.
La fachada este -la mejor conservada del monumento-, está edificada a través de plataformas superpuestas que le otorgan una forma piramidal. Sobre las plataformas se hallaron fogones y quemas que evidencian ofrendas de animales (cuy, camélidos) y productos agrícolas (maní, maíz, gramíneas). Asimismo, se hallaron muros policromos de color azul, gris y blanco, con diseños geométricos en bajo relieve.
El componente arquitectónico recurrente descubierto en Huantille, es una habitación en forma rectangular con una banqueta en forma de L, es decir dos de los cuatro muros del recinto estaban flanqueados de bancas de tapial, presuntamente vinculados a reuniones de la clase de elite o gobernante, en las que se decidían asuntos referentes a la producción y su distribución. Este patrón de recinto seria único y sui géneris para sitios arqueológicos Yshma, siendo un aporte significativo en el entendimiento del proceso social prehispánico.
La arquitectura del monumento en su sección central está organizada en recintos, patios, plazas, escaleras y pasadizos. La sección norte constituye la fachada principal del monumento arqueológico y está vinculada a una escalinata central de acceso a la plaza, así como con plataformas superpuestas aun enterradas.