El presidente Pedro Castillo vistió un traje raro para la ceremonia de juramentación al cargo de Presidente de la República, un gran desacierto, por ser copia de los trajes que usaron otros mandatarios de América Latina.
Hubiera sido preferible que use un terno clásico antes que eso, pero si se trataba de salir de los esquemas tradicionales, había muchísimas opciones que escoger con detalles peruanos que podrían haber estado mucho más acordes con su sombrero tradicional.
Siendo el Perú cuna de culturas admiradas en todo el mundo en sus tejidos, como los Paracas, es un escándalo que copie lo extranjero.
Un detalle Paracas podría haber sido bello, o bien un poncho elegante de los cuales hay muchos modelos y colores que escoger, lo cual habría dado un toque peruano con mucha prestancia.
Esperemos que Castillo y sus asesores tengan mejor criterio para las próximas oportunidades.