Herbert Mujica Rojas

Desde el 24 de junio, con el terreno desbrozado y limpio, quedó como única postulante en carrera a la presidencia de OSITRAN, su actual e irregular titular, Verónica Zambrano. Sin embargo, la resolución de su nombramiento sigue sin publicarse.

 

veronica zambrano ositran



OSITRAN protagonizó un extraño giro en los últimos días a favor de la posibilidad que el concesionario del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, la empresa Lima Airport Partners, LAP, pudiera operar con dos terminales. Como es de público conocimiento, esa opción ya fue echada al traste y aceptada en la evidencia de su absoluto fracaso por la propia LAP.

¿Qué ocurrió para que OSITRAN bajo la capitanía de la señora Zambrano, solicitara y pagara con recursos públicos, un nuevo estudio legal que sí dejaba la puerta abierta hacia la fallida intención de dos terminales de LAP? No sólo desoyó a sus propios organismos de línea que habían dictaminado, meses atrás por la improcedencia del ahorro en que quería transitar LAP sino que todo ha sido confirmado por la DGAC en su contundente carta del 1 de los corrientes a la concesionaria.

Por tanto hay aquí un tema de pura coincidencia que terminó en derrota: los dos terminales que LAP pugnaba por introducir y la ayudita de OSITRAN, estaban en plena sintonía. Felizmente Perú pudo saborear el respeto hacia el contrato de concesión entre LAP y el Estado peruano y les dijeron NO con todas sus letras.

¿No es de advertir que esa coincidencia pudiera tener mayores o comprometidas consecuencias a posteriori cuando la concesionaria desee replantear su elaborado ajedrez de maniobras ahorrativas para ella pero oneroso para el Perú?

La carnecita de las reguladoras está en: OSIPTEL, OSINERMIN y OSITRAN.

Este año los dos primeros tuvieron problemas habituales en estos “transparentes” concursos: inscritos más allá de la fecha límite; candidatos sin currículo suficiente para seguir en carrera, favoritismos que son denunciados en grupo y públicamente. Pero, la comisión evaluadora, sorda y ciega, siguió adelante y declaró un ganador, que de inmediato fue refrendado por PCM y el inquilino de Palacio.

Cosa extraña: en OSITRÁN, con los mismos o similares problemas, la primera convocatoria fue declarada Desierta.

Correspondía entonces pasar a una inmediata segunda convocatoria, pero no se dio. Antes había que prolongarle a la señora Zambrano, el mandato más allá de lo legalmente establecido (60 días naturales desde el 16 de febrero) -total, una infracción más qué importa a estas alturas- para que no ocurra nada extraño con la nueva posición, favorable a LAP, por el consejo directivo del regulador.

¿Qué se espera? Que bajen las aguas, por ahora, agitadas por el escándalo LAP; o, a evaluar las reacciones, ahora que ya aceptó LAP allanarse a la posición técnica de la DGAC?

Pero OSITRAN ya tiene un presidente con nombre y apellido, llueva, truene o relampaguee, ni más ni menos que Verónica Zambrano.

Cuál sea el motivo queda claro que la señora Verónica Zambrano no es garantía de un proceder imparcial y técnico; mucho menos, patriótico. Y que de ser ratificada será pues rehén de lo no obtenido por LAP, que intentará recuperarlo de distinta forma.

A estas alturas cabe preguntarse: ¿con quiénes más está en coincidencia Verónica Zambrano, sólo con LAP o hay otros concesionarios que pueden exigirle los mismos derechos?

 

04.07.2022
Señal de Alerta-Herbert Mujica Rojas