Wilfredo Pedraza: ¡Contacto en Francia!
por Herbert Mujica Rojas
El cargo de ministro del Interior se asemeja al de capitán de un barco: muere al mando de su nave o supera la fiereza del mar para arribar sano y salvo a puerto seguro. Difícil, aquí o en la Cochinchina, entender que un funcionario cuestionadísimo en ese portafolio, parta a la Ciudad Luz desde el 2 de los corrientes y con propósitos que llaman a más de una reflexión.