Los provincianos más optimistas están viendo en Martín Vizcarra –recientemente juramentado Presidente del Perú– un personaje cuya gestión se ocupará con mayor detenimiento de las regiones del país y sus problemáticas específicas. Los gestos políticos que tuvo la primera semana de mando, nos dan una ligera esperanza de que así será. En el caso del sur –como en el resto del país– hay una serie de proyectos paralizados, y no hablamos de obras con pequeños impactos, sino de una agenda de proyectos postergada que dinamizaría la economía regional.

No será fácil evitar las discrepancias y promover la coherencia

Por Herberth Cuba

La designación del nuevo gabinete ministerial ha sido sorpresiva. Las diversas versiones mediáticas parece que obedecían a los deseos de introducir nombres en las designaciones, más que al afán de informar trascendidos veraces. El hermetismo con el que se manejó la información entre el presidente, el premier, los entrevistados y quienes al final fueron designados ha reafirmado, una vez más, que la gran política requiere estrategia, planificación y secreto. Nadie ha extrañado “la transparencia”, la “visibilización” ni la “previsibilidad”. En este contexto, se sobreentiende que han participado los líderes de los partidos políticos; sobre todo de aquellos partidos que pusieron su cuota de poder congresal para la renuncia del expresidente PPK.

Por Mg CPCC Luis Alberto Latìnez Carpio*

El Congreso de la República debe designar una Comisión para investigar al corrupto y lobista Kuczynski, quien horas antes de renunciar  a la Presidencia de la República, aprobó cinco (5) Decretos que autorizan la próxima firma de cinco (5) contratos petroleros que otorgan derechos de exploración y perforación a Tullow Oil frente a la costa norte del país.

Por Wilfredo Pérez Ruiz (*)

Como colofón de la crisis política en el Perú, que culminó con la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski Godard, hace unos días tomó la jefatura de Estado el primer vicepresidente Martín Alberto Vizcarra Cornejo. Una pertinente ocasión para referirme al máximo emblema de su investidura: la Banda Presidencial.

En una coyuntura que compromete a los cuatro últimos expresidentes de la República en casos de megacorrupción y donde además el descontento social se traduce en desconfianza hacia el sistema, paros agrarios y movilizaciones en las calles que reclaman por nuevas elecciones, Martín Vizcarra asume la conducción del país como el nuevo Jefe de Estado.