La Tierra tuvo dos satélites, uno desapareció en colisión
La Tierra habría tenido un satélite además de la Luna, el cual desapareció tras una colisión, indican científicos de la Universidad de California, que publicaron su hipótesis en la revista Nature.
Según su estudio, las montañas, tierras altas, de la cara oculta de la Luna podrían ser los restos de una gran colisión entre ella y otro satélite terrestre más pequeño, fulminado en la colisión.
Erik Asphaug y Martin Jutzi explican que un objeto del tamaño de Marte chocó con la Tierra en los orígenes del Sistema Solar, de lo cual salieron despedidos trozos de masa que formaron la Luna y otro satélite objeto, que en los inicios compartió la órbita de la Luna, pero que chocó con ella.
Señalan que su estudio concuerda con lo conocido sobre la estabilidad dinámica de este sistema, el proceso de enfriamiento de la Luna, y las edades de las rocas lunares.
Mediante simulaciones recrearon el impacto entre la Luna y su compañera con masa 30 veces menor y observaron que a baja velocidad, por la corta distancia, el impacto no pudo generar un cráter ni fusionar la materia, que se quedaría amontonada en la región afectada hasta formar una gruesa capa de corteza, de varios kilómetros de profundidad.
La explicación de las grandes diferencias que hay entre los dos lados de la Luna es fruto de una gran controversia científica. Uno de ellos es bajo y plano, mientras el otro es montañoso. "Habría sido un impacto extraño que, al ser lento, no forma un cráter, sino que amontona material en la superficie", explica Asphaug.
Además, su modelo explica también por qué la composición de la corteza lunar es diferente: en ese lado hay potasio, elementos de tierras raras y fósforo. Son elementos que se concentrarían en el océano de magma que se solidificó bajo la corteza de la Luna y que, con el impacto, resultó aplastado.
Pero otras hipótesis, también publicadas en revistas de prestigio, encuentran otras explicaciones, como que las montañas las crearon las fuerzas de las mareas o que la diferente composición se debe a extraños volcanes.