Hace cuatro años, una niña de cinco años, Daisy Morris, encontró un fósil en una playa de la Isla de Wight, y lo entregó al experto local en dinosaurios, Martin Simpson.
Los ientíficos de la Universidad británica de Southampton estudiaron por cuatro años dichos restos y concluyeron que se trata de una nueva especie de pterosaurio, un reptil volador y calculan que el fósil tiene unos 115 millones de años de antigüedad, según informa la BBC.
El animal fue bautizado tomando el nombre de su descubridora y se denomina Vertidraco Daisymorrisae, Vertidraco significa “dragón de la Isla de Wight.” Gracias a la menor ahora se conoce una nueva especie y el Museo británico de Historia Natural alberga a un nuevo fósil.
Gráfico: dinosaurstudy.com