De acuerdo con el ESET Security Report Latinoamérica, informe que la firma lanza todos los años, este tipo de ataques informáticos fueron los más comunes durante el último año.
La infección por códigos maliciosos ha alcanzado a la mitad de las empresas en Latinoamérica durante 2012, ubicándose en el primer lugar entre los incidentes sufridos por las compañías de la región.
Esta cifra, que muestra un marcado crecimiento durante los últimos tres años, se debe a que los atacantes buscan constantemente nuevas alternativas para propagar estas amenazas, como por ejemplo a través de servicios vulnerables en internet.
La información es parte del ESET Security Report, informe que analiza el estado de la seguridad informática en Latinoamérica y presenta los resultados de encuestas realizadas a más de 3600 profesionales de distintas organizaciones.
Con respecto a las amenazas en cada país, se destaca que Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Venezuela, Bolivia y los países de Centro América estuvieron por encima del promedio de la región: más del 50% de las empresas encuestadas en estos países sufrieron un incidente relacionado con malware en los últimos doce meses.
Solamente México, Chile, Uruguay y Argentina tuvieron menos de la mitad de sus empresas comprometidas con incidentes de este tipo en el último año.
En cuanto a la percepción que tienen las compañías sobre el tema, sólo un 27% menciona a los códigos maliciosos como la mayor preocupación en materia de seguridad.
Si se analizan los Planes de Respuesta a Incidentes o de Continuidad del Negocio que desarrollan, sólo el 26% de las empresas encuestadas cuentan con uno. Es decir, 3 de cada 4 empresas en Latinoamérica no tienen claramente definido cómo deben actuar en caso de que se presente un incidente que comprometa la seguridad de la información.
“La forma más efectiva de hacer frente a estos ataques es a través de educación constante: hay una marcada tendencia a que se incremente el porcentaje de incidentes cuando no se llevan a cabo actividades de capacitación.Se observa una predisposición similar en cuanto a la inversión que se realiza en el área. Sin lugar a dudas, estos son los pilares sobre los que se deben basar las políticas de seguridad de las organizaciones”, aseguró Raphael Labaca Castro, Coordinador de Awareness&Research de ESET Latinoamérica.