Científicos de la Universidad de Darmstadt, Alemania, consiguieron que un haz de luz se detenga durante un minuto, logro alcanzado empleando un láser enfocado hacia un cristal opaco congelado a temperaturas inferiores a 232 grados Celsius.
Como se sabe, la luz se desplaza a 300 mil kilómetros por segundo. El récord anterior fue de 16 segundos, alcanzado a principios de 2013, informa la revista New Scientist.
Según los investigadores, el experimento posibilitará el desarrollo de iInternet cuántico, una red futura 100% segura y con una velocidad incomparable.
Con la finalidad de mantener la luz en el cristal, el equipo científico primero creó una pequeña zona de transparencia en su interior para que la luz pase por allí. El impacto del láser hacía a los átomos del cristal entra en un estado de superposición cuántica que volvía al material transparente, pero una vez que la luz se acercaba al cristal, el láser se apagaba, lo que convertía al cristal en un cuerpo totalmente opaco capaz de detener completamente el haz de luz.
El experimento demostró que la luz no era simplemente absorbida por el cristal, como cuando se dirige a un objeto sóllido, sino se quedaba en el lugar donde fue bloqueada y todavía era posible observarla.
Finalmente, la luz fue soltada cuando los investigadores abrieron una vez más la transparencia del cristal mediante el mismo láser. Este procedimiento permitió medir las partículas del haz liberado y por lo tanto obtener más información sobre él.