Investigadores del Museo Nacional de Río de Janeiro anunciaron este jueves el descubrimiento de un nuevo dinosaurio brasileño, el "Berthasaura Leopoldinae", cuya principal característica es no contar con dientes.

Berthasaura Leopoldinae UFRJMuseo Nacional Brasil



"El descubrimiento abre una serie de interrogantes; teníamos el Limussaurus, en China, donde formas jóvenes de esa especie tienen dientes, que se pierden cuando llegan a la edad adulta, pero ahora tenemos un animal totalmente diferente, que nunca tuvo dientes; entre todos los descubrimientos que hice en mi vida éste está en el top 5", destacó en rueda de prensa el director del Museo Nacional, Alexandre Keller, según recoge el diario O Globo.

Los fósiles de este dinosaurio fueron encontrados en una zona rural de Cruzeiro do Oeste (en el estado de Paraná, sur de Brasil).

El dinosaurio vivió hace 70 u 80 millones de años, en el periodo Cretáceo y era de pequeño porte, con poco más de un metro de largo y 80 centímetros de altura.

Pertenece al grupo de los terópodos, donde predominan especies carnívoras y con dientes, como el famoso Tiranosaurio Rex, pero el Berthasaura Leopoldinae probablemente era omnívoro.

Los investigadores no lo tienen claro; en lugar de dientes poseía una especie de pico córneo, una lámina ósea bien desarrollada en la arcada superior, diferente a todos las especies encontradas en Brasil hasta ahora.

El nombre con el que ha sido bautizado es un homenaje triple: por un lado recuerda a Bertha Maria Júlia Lutz (1894-1976), que fue bióloga del Museo Nacional y tuvo un papel destacado en la lucha por los derechos políticos de las mujeres brasileñas.

El "apellido" Leopoldinae se refiere a la Imperatriz brasileña Maria Leopoldina (1797-1826), gran impulsora de las ciencias naturales en Brasil, y al mismo tiempo a la escuela de samba Imperatriz Leopoldinense, que en 2018 dedicó su desfile de Carnaval al Museo Nacional.

El Museo Nacional de Río de Janeiro se quemó casi totalmente en un incendio en septiembre de 2018 y ahora está empezando a ser reconstruido; en paralelo, sus investigadores, vinculados a la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), siguen trabajando.


Con información de Sputnik