Hemos leído que los expertos señalan que las rapaces tienen hábitos de caza diurnos y que no cazan de noche, excepto los búhos y similares. No obstante, una cámara deja ver que las águilas pueden cazar de noche en Lima.

 

aguila en cable de noche

Ya con su presa en un cable telefónico

 

En el distrito de La Molina a veces se les ve cazando de día, pero esta vez se pudo ver una en la oscuridad, a las tres y media de la madrugada y se ha captado desde los momentos previos a la caza.

Suelen frecuentar parques donde buscan sus presas. Otras rapaces menores en estos lugares se contentan con pajaritos, pero las águilas buscan palomas.

Como toda águila, tras cazar llevan su presa a un lugar alto. Se las ha podido ver cazando palomas de día. Llevan su presa a lo alto y la sujetan con sus garras sin prisa por comerla, esperando largos minutos tal vez hasta que se debilite, lo cual indica que no pasan hambre.

Quizás se trate  del mismo animal marrón pardo oscuro o su pareja, que visto de día algo cerca en un poste de luz, por el tamaño de la paloma presa en su garra, que parece poca cosa, la rapaz podría tener al menos unos 70 centímetros desde la cabeza a la punta de la cola.

Puede ser  que la necesidad de cazar también de noche se explique porque tiene una cría grande, que por ahora vuela un poco, pero no caza todavía y por su tamaño debe requerir buenas porciones. A la cría se le ha visto y escuchado en techos y parques con su típico chillido.

La grabación de la cámara que capta la caza dura algo menos de media hora y comienza alrededor de la 03:33 h, cuando el águila está en un lugar bajo, tal vez el suelo del parque o un arbusto, confiada en que a esa hora nadie la molestará (porque de día sólo están en lo alto), y detecta a una paloma. Entonces asciende a la palmera, donde coge a la colombácea y permanece allí por unos minutos.

 

aguila sube a palmera de noche

El águila estaba en un lugar bajo y vuela a la palmera tras detectar una paloma

 

Luego vuela con su presa a otro lugar y poco después se para en un cable al alcance de la cámara. El punto donde se detiene tiene un ángulo metálico horizontal que podría dar comodidad a la cazadora y se ve a la paloma todavía con vida. La rapaz se mantiene tranquila y pica un poco a la presa, la cual, tras perder muchas plumas finalmente perece.

Por unos minutos se ve que se detiene una camioneta de serenazgo, con sus luces intermitentes características, justo al frente del lugar donde se encuentra el águila. Los serenos no se percatan de la presencia del ave y uno de ellos baja del vehículo por un momento, lo cual no parece importar a la rapaz, que sigue tranquila en el mismo lugar hasta que los serenos se marchan. Sin embargo, ante la presencia del serenezgo el ave se mantiene quieta y sólo voltea la cabeza para ver cuando la camioneta se aleja.

Finalmente, el águila sale de escena llevando su presa a otro lugar.

Para ver mejor los detalles se ha tomado fracciones de la secuencia que dura cerca de media hora. En el vídeo se puede ver el ascenso del águila para capturar a la paloma y cómo permanece en el cable telefónico sin importarle la cercanía del vehículo de serenazgo.