La corporación espacial rusa Roscosmos no va a lanzar el cohete Soyuz 2.1b con los satélites británicos OneWeb, desde el centro espacial de Baikonur, si no se le presentan garantías de que estos satélites no se usarán con fines militares, dijo el director general de la empresa, Dmitri Rogozin.
"Exigimos garantías jurídicas exhaustivas de que la compañía OneWeb no utilizará estos satélites con fines militares", declaró Rogozin a la cadena televisiva Rossiya 24.
Según Rogozin, si Roscosmos no recibe tales garantías hasta los 21.30 (GMT+3) del 4 marzo, "el cohete se retirará del lanzamiento y los satélites se enviarán al centro de montaje".
Al mismo tiempo, Roscosmos presentó otra exigencia, que prevé la retirada del gobierno del Reino Unido de los accionistas de la compañía de telecomunicaciones OneWeb.
"En relación con la posición hostil del Reino Unido hacia Rusia, otra condición para el lanzamiento de los objetos espaciales el 5 marzo es la salida del gobierno británico de los accionistas de OneWeb", dice un comunicado de la corporación.
OneWeb planea crear una flotilla de satélites que proporcionará acceso de banda ancha a internet a usuarios de todo el mundo. La flotilla deberá ser desplegada completamente hacia junio de 2022.
Según se informó con anterioridad, este año deben realizarse seis lanzamientos del cohete Soyuz desde el cosmódromo de Baikonur y uno, ya llevado a cabo, desde la base espacial de Kurú, en la Guayana Francesa.
En los días recientes se informó que OneWeb aún no ha decidido si el lanzamiento previsto para el 5 marzo será aplazado debido al clima internacional actual.
Rusia, por su parte, aseguró estar dispuesta a seguir cumpliendo con las obligaciones contractuales y realizar los preparativos para el lanzamiento.
Con información de Sputnik