Viaje anunciado de OHT a Chile a la trasmisión del mando de Chile
Capitàn Eloy Villacrez
Hace unos días llegó una invitación protocolar del Gobierno Chileno a OHT para asistir a la trasmisión del mando que efectuará Piñera a Bachelet el 12 de marzo de los corrientes, al respecto es preciso mencionar, que si bien de rutina se cursan invitaciones, dar el agreement en forma inmediata (aceptación en términos diplomáticos), como procedió a hacer OHT, es una torpeza, por decir lo menos, o lo hace cumpliendo insinuaciones del Departamento de Estado USA, para no resquebrajar la “Alianza del Pacifico” que es su brazo económico ejecutor. Realmente es una infracción constitucional, puesto que esa aceptación inmediata responde a la existencia de magnificas relaciones y todos los peruanos sabemos que no es así. HAY GESTOS Y GESTOS; y aceptar la invitación de esa manera, en las presentes condiciones, cuando Chile pretende apropiarse del triangulo terrestre en Tacna, no ocupar ese territorio es una transgresión del artículo 154 de la Constitución Política del Estado..
Esta aceptación a la trasmisión de mando de la presidencia de Chile, al existir diferencias territoriales, relacionadas con la soberanía peruana del triangulo terrestre, desconocido oficialmente por Chile en la persona de Sebastián Piñera y que ha sido corroborado por la nueva presidenta Bachelet, coloca al Perú en situación muy delicada, por decir lo menos, puesto que nos han dicho con otras palabras, “EL TRIÁNGULO TERRESTRE ES CHILENO, VENGAN A SACARNOS”.
Hace mas de cien años de terminada la Guerra del Guano y del Salitre, jamás presidente alguno del Perú asistió a una trasmisión de mando de Chile; el primero que rompe esa tradición es Alan García al hacer una visita de estado a Chile. Se comprende que esa política de nuestro País de evitar relacionarnos al más alto nivel era una NO ACEPTACIÓN DE LOS TÉRMINOS DE REFERENCIA DEL TRATADO DE ANCÓN y es el sentimiento de la gran mayoría de peruanos; se desconocen las motivaciones que existieron para romper esa tradición.
Pedir que un fronterizo como OHT tenga conceptos de Patria y Dignidad es inpensable, pero es importante precisar aspectos legales y constitucionales que se ajustan en este caso. De acuerdo al Código Penal del Perú, es delito de Traición a la Patria: "Artículo 325.- Atentado contra la integridad nacional. El que practica un acto dirigido a someter a la República, en todo o en parte, a la dominación extranjera." OHT acepta la imposición chilena sobre le triangulo terrestre con su presencia en la trasmisión del mando, y eso constituye Traición a la Patria.
Por ese delito, el Presidente debe ser acusado por la Comisión Permanente del Congreso de acuerdo al Art. 117 de la Constitución del Estado, puesto que OHT faltó a uno de sus deberes, tipificado en el art. 118 inc 15. Lo expresado es motivo suficiente para volverse ilegal el ejercicio de la Presidencia del Perú, debe vacar en el cargo. Recordando además que según el artículo 165.o de la Constitución vigente, las FF. AA. tienen el deber de garantizar la integridad territorial; no hacer cumplir ese mandato constitucional es un delito, por tanto un nuevo gobierno deberá proceder en caso en que no actúen, enjuiciando por omisión o complicidad a los responsables, teniendo presente que ese delito es pasible de ser juzgado hasta cinco años después de ser cometido.
Probablemente los altos mandos como siempre acepten esta ilegalidad e ilegitimidad del poder, porque les conviene seguir engordando ilícitamente sus bolsos; de lo que estoy convencido es de la existencia de oficiales patriotas que están dispuestos a actuar con honor colocando en alto nuestro lema premilitar “Antes, antes que todo el Perú”. Tenemos la convicción absoluta de que en ese afán de recuperar nuestra dignidad de Nación los militares serán acompañados por las organizaciones populares y el pueblo en general.
¡Viva el Perú! ¡Fuera los traidores!
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Militares traidores sirven a Chile “[…] porque con su conducta dejaron de ser hombres y menos patriotas, solo usan al país para robar el presupuesto, cobrar pensiones y sueldos, que jamás justificaron, vanagloriándose casi todos ellos de haber asesinado pueblos normalmente quechuahablantes, logrando sus entorchados y grados militares con la sangre de hermanos que muchas veces no tuvieron nada que ver en el enfrentamiento que tuvimos años atrás…” Capitán Eloy Villacrez |
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