Poder Ejecutivo no acepta moratoria de 10 años para ingreso de semillas transgénicas
Se han incluido nueve conclusiones a dicha moratoria al ingreso de los OVM, que ocasionaría que el país incumpla las disposiciones de los acuerdo de la Organización Mundial del Comercio, informó ministro Villasante
El Poder Ejecutivo observó hoy la autógrafa de Ley que declara una moratoria al ingreso de los Organismos Vivos Modificados (OVM) por un periodo de 10 años, con fines de cultivo, crianza o de cualquier índole de productos transgénicos, aprobada el pasado 7 de junio por el Pleno del Congreso.
En conferencia de prensa, el ministro de Agricultura, Jorge Villasante, informó que el documento fue ingresado hoy al Parlamento y cuenta con nueve conclusiones en las cuales se señala que la autógrafa desestima lo avanzado en materia de bioseguridad desde que se promulgó la Ley N.º 27104 en el año 1999.
Asimismo, indica que bastaría solo cinco años para establecer redes de filtración que minimicen el riesgo de introducir genes nuevos a especies emparentadas con plantas nativas o con posibilidades de flujo de genes, pudiéndose en tal lapso incluir mediante técnicas de mejoramiento, sistemas para evitar el flujo de genes.
Añadió que la autógrafa de Ley adolece de serias deficiencias que generarán vacios en una serie de actividades relacionadas con la biotecnología moderna y transgénicos. Citó como ejemplo que la moratoria imposibilitaría el ingreso y la comercialización de medicinas obtenidas con biotecnología y pondría en riesgo el acceso a las mismas por numerosos pacientes de enfermedades que son tratadas de manera eficaz con estos medicamentos.
Desde su despacho, dijo que una moratoria al ingreso de los OVM generaría que el país incumpla las disposiciones de los acuerdo de la Organización Mundial del Comercio y podría ocasionar hasta demandas y sanciones comerciales contra el Perú ante dicha institución.
La promulgación de la autógrafa podría disminuir el comercio con Brasil, Uruguay y Argentina (MERCOSUR), así como con Bolivia y Colombia (CAN). También paralizaría las actividades de investigación en biotecnología moderna y consecuentemente el desarrollo nacional agropecuario, forestal, acuicultural y médico, limitando el acceso de los profesionales peruanos a los avances científicos y tecnológicos, además de la genética.
Villasante Aranibar dijo que este proyecto impediría la importación de vacunas para la salud humana, insulina y gran cantidad de insumos y fármacos biológicos de diversos uso y espectro, perjudicando seriamente el acceso de los peruanos a los medicamentos y tratamientos contemporáneos de salud.
Asimismo, el MINAG a través del INIA, el viceministerio de Pesquería del Ministerio de la Producción y la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) del Ministerio de Salud, así con el CONCITEC dejarían de ser autoridades nacionales competentes en materia de biotecnología.
Por último de promulgarse la autógrafa, el Ministerio del Ambiente, como autoridad nacional competente en materia de OVM, asumiría facultades que trascienden su ámbito de competencia en materia ambiental.