Escrito por Conacup
El día de ayer fue el 4to. aniversario de la entrada en vigencia de la Ley 29571 “Código de Protección y Defensa del Consumidor”. Como todos los aniversarios quienes estamos en este lado de la vereda defendiendo a los consumidores hacemos por lo general una reflexión de lo andado y lo que falta por andar para lograr tener un verdadero sistema de protección al consumidor.
A excepción de una “tibia” celebración por parte de la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso de la República, no ha habido otro pronunciamiento por parte del Estado respecto a este acontecimiento, lo que pone de manifiesto la real importancia que tiene para el Estado (Ejecutivo, Legislativo, Judicial, gobiernos locales y regionales) las políticas públicas reconocidas en el Código del Consumidor y el papel que deben desempeñar nuestras autoridades al respecto.
Sin embargo, uno de los más conspicuos congresistas que enarbolan la bandera de la defensa de los consumidores, el congresista Jaime Delgado, aprovechó la ocasión para poner de manifiesto la falta de interés que tiene el actual gobierno —al cual él pertenece—, sobre la importancia de exigir el etiquetado de productos alimenticios con contenido transgénico. Mas aún el día de hoy se publicó en el semanario “Hildebrandt en sus Trece” un artículo de su autoría titulado “Comer a ciegas” analizando dicho tema.
El problema del contenido de insumos transgénicos en los alimentos es importante, que duda cabe, desde esta humilde tribuna hemos solicitado, no hoy sino hace casi tres años, que el INDECOPI y el gobierno cumpla con su función de velar por el derecho a la información que tenemos todos los consumidores y derecho que es una de las piedras angulares en para la protección de los consumidores.
Sin embargo, creo que el congresista Delgado esta perdiendo una oportunidad de oro para todos los consumidores. Él quien fue fundador de la ASPEC, la asociación de consumidores mas representativa de estas organizaciones, quien fue el primer activista en el movimiento consumerista en lograr una curul en el Congreso de la República enarbolando la bandera de los consumidores y además en su calidad de hombre de confianza del presidente Humala (fue vocero de los congresistas del partido de gobierno), se ha preocupado, creo, únicamente en temas si bien importantes, no de la importancia trascendental para una verdadera institucionalidad de la defensa de los consumidores.
Como muy bien el congresista Delgado dijo en alguna ocasión, un verdadero sistema de protección al consumidor no puede entenderse como una gran ventanilla de reclamos, es necesario creo recordarle ello. La defensa de los consumidores es una lucha de largo aliento, pensar que el congresista Delgado o su ‘hija’ ASPEC son los únicos idóneos para defender a los consumidores, es caer en lo mismo por lo que viene luchando hace más de 30 años, un monopolio, pero esta vez, de la defensa de los consumidores.
En vez de impulsar únicamente y con tanta energía una ley de fusiones o una ley de insolvencia familiar, debió impulsar con la misma energía una ley del fortalecimiento de las asociaciones de consumidores, organizaciones sin fines de lucro que no pueden percibir ingresos privados y tienen como incentivo perverso las multas de las denuncias que promueven, sistema en donde su ASPEC es la mas beneficiada. En vez de preocuparse únicamente por una reforma del sistema privado de pensiones que a las finales resultó un fracaso parcial, debió impulsar una ley que de una vez por todas contemple “las acciones colectivas” o “class action“, ya que los perjuicios mas grandes o en masa se dan justamente con estas conductas empresariales que deben ser atacadas con este tipo de acciones legales inexistentes en nuestro país. Debió impulsar con las misma vehemencia que la ley de la comida chatarra, una ley que nos permita a todos los consumidores de contar con programas radiales o televisivos de propiedad estatal para la difusión de los derechos de los consumidores y las actividades de la organizaciones que la representan, y no conformarse con que su ASPEC sea la única que tenga ese privilegio, que mas parece monopolio.
Si creemos realmente en la defensa de los consumidores, antes de pensar en leyes, pensemos en construir la institucionalidad de ella, y con un sólo defensor y una sola asociación de consumidores no lo vamos a lograr.
Feliz cuarto aniversario del Código del Consumidor!
http://conacup.org.pe/el-codigo-del-consumidor-y-sus-defensores/