En algunas ocasiones vas a notar que, luego de pagar a proveedores, cancelar impuestos y cumplir con los pagos a tus trabajadores, aún te queda dinero en la cuenta. Esta situación se da, en particular, luego de campañas importantes como la del Día de la Madre, que suele generar buenos ingresos. No te sorprendas, ese dinero tiene un nombre, “excedente” y puede ser muy útil para el futuro de tu negocio si lo administras con responsabilidad y eficiencia.
El Consultorio Financiero de Mibanco te da cinco consejos para manejar tu excedente:
- Invierte en tu negocio. Sin darte cuenta, estarás frente a una interesante decisión: gastar el dinero de más en tu hogar o usarlo en mejorar tu negocio. Toma en cuenta esto: es cierto que tu negocio es tu fuente de ingresos y que con este pagas las cuentas de la casa, educas a tus hijos, etc. Por lo tanto, sabes qué porcentaje de tus ingresos va a los gastos domésticos. Si usas tu excedente para que tu negocio crezca, generarás más ingresos y el porcentaje para tu hogar significará más dinero, ¡no una vez sino todos los meses!
- Utiliza un fondo de cobertura. El nombre es pomposo, pero la utilidad es simple. Es dinero que puedes utilizar para cubrir los gastos de una emergencia que afecte a tu negocio. Aunque parezca que tenemos todo controlado, un suceso imprevisto puede alterar la continuidad de tu fuente de ingresos, por eso hay que estar preparados. Lo ideal sería que ese dinero no quede inmóvil, porque pierde valor con la subida del costo de vida. Buenas alternativas son una cuenta de ahorros o a plazo fijo en un banco que te dé buena tasa de interés.
- Adelanta tus pagos. Los pasivos son las cuentas por pagar. Si tienes un préstamo grande con un banco y ves que las cuotas afectan tu liquidez mensual, aprovecha ese dinero extra para adelantar pagos.
- Compra mercadería. Tal vez luego de una temporada grande los precios de tus proveedores bajan y puedes adelantar compras para los siguientes meses. Ten precaución al hacerlo, es mejor que sean ítems que tienen salida rápida asegurada; por eso es importante que analices tu mercado y preguntes constantemente a tus clientes qué cosas necesitan o cómo puedes atenderlos mejor.