El número de desastres naturales devastadores crece en Rusia a un ritmo anual del 10 por ciento, según el asesor del Consejo nacional de Seguridad, Alexandr Abelin.
"A causa del cambio climático, últimamente se registra un aumento en la frecuencia de los fenómenos hidrometeorológicos peligrosos que se estima en un 10 por ciento anual", señaló.
El funcionario reconoció que la huella humana en el medio ambiente sigue siendo muy importante en Rusia.
También advirtió que el calentamiento global podría tener en un futuro un gran impacto en la calidad de vida de los rusos y en el desarrollo del país en general.
"Los cambios climáticos que se esperan repercutirán inevitablemente en la vida de las personas, en el estado del mundo animal y vegetal de todas las regiones del país, y en algunas de ellas se convertirán en una amenaza palpable para el bienestar de la población y el desarrollo sostenible", alertó.
Estas amenazas son especialmente relevantes para el Ártico, donde el deterioro del permafrost "tiene un carácter sistémico y perjudica la integridad tecnológica de las infraestructuras industriales y de transporte, así como de las instalaciones urbanas", subrayó.
Con información de Sputnik