56% y 54% respectivamente. El mayor porcentaje de desempleo juvenil se encuentra entre los 18 y 24 años donde el 12,6% de los jóvenes con educación superior completa técnica o universitaria se encuentran desocupados.
El Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima reveló que el subempleo por ingresos se ha incrementado en las zonas rurales del país, específicamente en la región Sierra y Selva registraron en el 2014 niveles de 56 y 54,2%, respectivamente, de la PEA ocupada rural.
Funte: INEI. Elaboración: IEDEP
A nivel nacional existen 7.1 millones de personas que se encuentran bajo la condición de subempleados por ingresos, es decir, laboran un número de horas igual o mayor a una jornada normal y perciben ingresos menores al ingreso mínimo referencial (IMR).
"Con base en las cifras del INEI, entre el 2011 y 2014 el subempleo por ingresos se ha incrementado ligeramente hasta alcanzar el 71,7% de la PEA ocupada rural. Mientras que entre el 2005 y 2011 se logró reducir de 86,5 a 71,6%", señaló César Peñaranda, director ejecutivo del IEDEP de la CCL.
Explicó que esta situación se da por la actual desaceleración de la economía, la postergación de proyectos de inversión privados y la caída de la inversión pública de los gobiernos subnacionales, las que perjudican las condiciones de empleo, particularmente en el interior del país.
DESEMPLEO JUVENIL
En tanto informó que, de acuerdo a cifras de la ENAHO 2014, el mayor porcentaje de desempleo juvenil a nivel nacional se encuentra en el segmento de 18 y 24 años donde el 12,6% de los jóvenes con educación superior completa técnica o universitaria se encuentran desocupados.
Señala que una posible explicación es porque este segmento debe encontrarse sobre calificado o sin la experiencia aún respecto a las oportunidades disponibles en el mercado. En total, el 8,8% de la población juvenil se encuentra desempleada, muy por encima del 3,7% de desempleo nacional del 2014.
"La baja productividad global de la economía peruana, además del accionar del Estado a través de la fijación del salario mínimo, los altos costos no salariales y restricciones a la contratación y despido de trabajadores hacen cada vez más difícil reducir el subempleo", anotó César Peñaranda.