Exportación en primer semestre del año se incrementó 8%. Para impulsar al sector se requiere trabajar en educación, desarrollo comercial y promoción de la oferta.
Después de un periodo de caídas, la exportación del subsector joyería y orfebrería habría llegado a un punto de inflexión gracias a la recuperación de la demanda de los EE. UU. En el primer semestre del año los envíos totales de ese subsector alcanzaron US$ 42.8 millones, 8% más que en el mismo periodo del año pasado, pese a la contracción de países de la región, señaló la Asociación de Exportadores (ADEX).
Julio Pérez, presidente del comité de Joyería y Orfebrería de la ADEX, comentó que EE. UU. se muestra como el mercado más estable entodo sentido. Su estabilidad económica ayudó a que solicite una mayor cantidad de joyas hechas con metales preciosos, lo cual es muy bueno para el país.
De acuerdo al gremio exportador, las compras de los EE. UU. sumaron US$ 32.6 millones, que representó un crecimiento de 47% y concentró el 76% de las exportaciones totales de joyería. Luego siguieron Bolivia (-23%), México (-15%), Ecuador (-43%), Chile (-28%), Colombia (-50%), España, Venezuela, Austria, Reino Unido, Costa Rica, entre otros.
“Los destinos latinoamericanos redujeron sus cuotas de importación por motivos comunes y específicos de cada país. Entre los motivos comunes está la devaluación de sus monedas respecto al dólar y como motivos específicos, Ecuador sigue con su tendencia proteccionista, y México estaría buscando mercados sustitutos”, reveló Julio Pérez.
Para impulsar al sector
En la agenda pendiente y urgente, para la joyería y orfebrería, está la aprobación del carné ATA, que facilitaría el traslado de muestras al exterior (permite la importación temporal por un periodo menor de un año sin pagar los aranceles e impuestos) cuya aprobación está pendiente en el Congreso, tras su paso previo por varias instancias del Estado. “Esperemos que el nuevo parlamento acelere el proceso”, dijo.
Mencionó que también se sigue trabajando en la obtención de la certificación de calidad para productos hechos de oro y plata junto con el INACAL e INDECOPI ya que proporcionará mayor competitividad al sector.
Julio Pérez destacó que se necesita trabajar en tres aspectos esenciales para el sector: En educación y conocimiento se requiere apoyo para acceder al financiamiento de proyectos de tecnología e innovación, así como para la prospección tecnológica a otros países.
En desarrollo comercial, es fundamental ampliar la asistencia de un mayor número de empresas a las principales ferias internacionales. Esta participación es primordial para conocer las tendencias mundiales y los intereses de potenciales clientes que ayudarán a impulsar las ventas.
En lo que respecta a la promoción, es esencial el apoyo de las embajadas y la OCEX en el desarrollo de certámenes como el III Congreso Internacional de Joyería y Orfebrería, que brindará información para el desarrollo y consolidación de la joyería peruana. Se realizará del 19 al 21 de octubre en Lima, con expositores procedentes de Italia, Brasil, Austria, Inglaterra y el Perú, entre otros.
“Paralelamente se desarrollará una rueda de negocios y talleres prácticos. La audiencia estará compuesta por pequeñas, medianas y grandes empresas, artesanos, diseñadores, estudiantes, se calcula una asistencia de alrededor de 400 personas”, expresó Julio Pérez.
Los productos con más demanda en el primer semestre del año fueron joyas y accesorios de oro como aretes, sortijas, pulseras, broches, collares, cadenas para cuello o reloj, entre otros.
