Mg CPCC Luis Alberto Latínez Carpio*
Hace un buen tiempo atrás propuse que se baje la tasa del IGV porque beneficiaría a las grandes mayorías, que destinan el mayor % de su sueldo para la compra de bienes y servicios y se subiera la tasa del Impuesto a la Renta, que el gobierno anterior había rebajado con una programación de llegar hasta el 26%, beneficiando de esta manera a los que más tienen, con la finalidad de compensar la caída del IGV. Todo indica que el gobierno está en el mismo camino, a pesar que cuando Kuczynski fue ministro de Economía y Finanzas no estaba de acuerdo con bajar la tasa del IGV.
Les recuerdo que el IGV es un impuesto indirecto, que afecta por igual a ricos y pobres, y el impuesto a la renta es un impuesto directo que afecta a los que más tienen.
Para que la baja de la tasa del IGV se refleje en los precios es necesario que se supervise en los mercados la rebaja de los precios de venta de los bienes y servicios, porque como sabemos los empresarios peruanos son reacios a las rebajas, pues los mantienen y hasta lo incrementan. Así tenemos, el caso de la importación de medicamentos contra el cáncer, el VIH y la diabetes que están exonerados del IGV.
* Asesor y consultor de empresas
- Especialista en tributación y auditoría.
- Presidente del Centro de Investigaciones Contables y Tributarios
- Past-Decano del Colegio de Contadores Público de Lima (CCPL)2007-2009
- Past-Director de Defensa Profesional del CCPL 2001-2003
- Ex-Jefe SUNAT
- Ex-Presidente del Instituto de Administración Tributaria (IAT)
