Sus envíos al exterior se incrementaron en 62.7% en el 2021, pero aún no logran alcanzar el récord de años anteriores.
A pesar del buen desempeño de los despachos de prendas vestir en el 2021 (sumó más de US$ 1,183 millones y creció 62.7% respecto al 2020), la Asociación de Exportadores (ADEX) alertó que las empresas exportadoras peruanas enfrentan algunos problemas como el desabastecimiento de hilados, lo cual le resta competitividad frente a otros proveedores mundiales.
El presidente del Comité de Confecciones de ADEX, César Tello, explicó que la capacidad nacional para fabricar hilado está al 100% (para la exportación), y cuando llegan nuevas órdenes de compra del extranjero, las hilanderías solo pueden entregar los pedidos entre 4 y 6 meses después. Lo mismo ocurre si ese insumo se importa desde los EE. UU., pues por la poca capacidad libre en los contenedores, los tiempos de despacho superan las 20 semanas.
“Nuestro sector se ha recuperado, sobre todo porque los clientes internacionales,a raíz de la pandemia, buscaron proveedores con tiempos de entrega cortos y políticas sostenibles como base de su estructura, y Perú es un gran punto por mirar para ellos. Sin embargo, esto deberá ir a la par con un incremento en la producción de materia prima, algo que no está sucediendo”, refirió.
A pesar de tener una alta demanda, explicó, las hilanderías no tienen la confianza suficiente para invertir en su crecimiento debido a la situación política del país y esto involucra a los hilados sostenibles como el orgánico, que no son fáciles de conseguir localmente.
No obstante, Tello resaltó la reivindicación del sector como pasado ancestral, con textiles milenarios con más de 6 mil años de antigüedad, y sumado a los temas de sostenibilidad, trazabilidad y transparencia en los negocios, factores que ayudaron a su recuperación.
“Somos un país con altos niveles de cumplimiento social que nos favorece frente a otros competidores. Contamos con una estructura vertical y flexible a la demanda actual del mercado, el cual se va a acomodando de acuerdo a las necesidades, pudiendo adaptarnos a estas variaciones", aseveró.
Buen año, pero no el mejor
En 2021 los despachos de las confecciones (US$ 1,183 millones) crecieron 62.7% respecto al 2020 (US$ 727 millones 528 mil) y 20.9% en relación al 2019 (US$ 978 millones 584 mil) antes de la pandemia. No obstante, aún no se alcanzan los récords históricos de años anteriores como en el 2008 (US$ 1,612 millones).
Según cifras del Sistema de Inteligencia Comercial ADEX Data Trade, EE. UU. continúa como el primer destino de las prendas de vestir peruanas al concentrar el 68.8% del total, sumando US$ 814 millones 801 mil y presentando un incremento de 64.8%. Le siguieron Canadá, Chile, Brasil, Alemania, Ecuador, Reino Unido, Francia, Costa Rica y Venezuela,
Mercado mundial
Según el ‘Reporte de Tendencias de Prendas de Vestir’ del Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales CIEN-ADEX, en el 2021 las ventas mundiales de este rubro (US$ 1.54 billones) habrían alcanzado niveles similares al 2017 (US$ 1.52 billones), principalmente por el impacto negativo de la pandemia. Sin embargo, se proyecta un monto superior a los US$ 1.9 billones en el 2025, con un crecimiento promedio anual entre 2022 y 2025 de 4%.
El país con las mayores ventas mundiales sería EE. UU. con una facturación de US$ 318 mil millones (2021), monto que representaría el 21% de las ventas mundiales. Sin embargo, China superaría ese valor en el 2025 con una tasa de crecimiento promedio anual de 4.6%, entre 2022 y 2025. En el caso de India, esta pasaría a ser el tercer principal mercado en el 2022 con un incremento anual de 5.4% en promedio, entre 2022 y 2025.
Tendencias
Según el informe, por la pandemia existe una inclinación creciente hacia las ventas en línea en este rubro, principalmente porque las nuevas empresas solo funcionan en la web, hay una mayor exposición al comercio electrónico y la disponibilidad de marcas de alta gama y productos de edición limitada.
“El año pasado, el 34% de las ventas en el mundo se habrían realizado a través de e-commerce. Se proyecta que al 2025 este comercio concentraría el 43%. Dentro de las ventas en línea, el 56% de las transacciones se habría efectuado a través de teléfonos móviles, y hacia el 2025 alcanzarían el 65% del total”, mencionó el reporte.
Por otro lado, más consumidores están presionando a las marcas sin prácticas ecológicas, y como resultado, algunas empresas están trabajando para modificar sus modelos de negocio y desarrollar productos con materiales más sostenibles.