Envíos cayeron -1% entre enero y mayo. Las producidas en nuestro país tienen una mayor ventaja competitiva frente a las de otros países, pero aún no se logra aprovechar su potencial. Cumplir con los requisitos de calidad e inocuidad mejorará las exportaciones.

Si bien las legumbres o menestras producidas en el Perú tienen valores diferenciales que las hacen mejores frente a las de otros países, aún no se logra aprovechar su potencial debido a diferentes factores, informó el presidente del Comité de Menestras y otros Granos de la Asociación de Exportadores (ADEX), Jorge Fernández Gil.

 

frejoles variedades

Durante su ponencia en el seminario por el Día Nacional de las Legumbres, celebrado cada 12 de julio, organizado por el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), señaló que se necesita un mayor trabajo-público privado a fin de recuperar la competitividad de esta oferta.

 

“Aún somos un país reactivo. Por ello, es momento de tomar la iniciativa y mejorar los procesos internos. Por el lado del Estado, Senasa debe capacitar a los productores en el uso óptimo de pesticidas y garantizar la inocuidad de la cosecha. En el caso de las empresas, dar un mayor valor agregado y diversificar la oferta permitirá abarcar más mercados”, refirió.

En ese sentido, consideró como fundamental cumplir con todos los requisitos de calidad e inocuidad a fin de recuperar la senda de crecimiento de las exportaciones, las cuales cayeron -3% en el 2023.

“Tenemos todo para lograrlo. Las menestras peruanas tienen un mayor valor diferencial, como los pallares y habas, que son de calibres grandes; el frijol canario, suaves y de rápida cocción; o el frijol castilla, de mejor calidad que los de Madagascar o Myanmar”, apuntó.

 

pallares adex

Asimismo, resaltó el valor nutricional y su importancia en la alimentación de los peruanos, sugiriendo darle una mayor promoción a aquellas legumbres que no son tan consumidas localmente.

“Tenemos el caso del frijol de palo (gandul), producido en gran cantidad en Piura y es bastante nutritivo, pero que casi no se consume en el país. Sería de gran ayuda si estuviera en la mesa de las familias peruanas, sobre todo de las más vulnerables”, acotó.

Despachos

Según cifras del Sistema de Inteligencia Comercial ADEX Data Trade, los envíos de legumbres sumaron US$ 30 millones 285 mil entre enero y mayo de este año, reflejando una ligera caída de -1% en relación al mismo periodo del 2023 (US$ 30 millones 734 mil).

El destino más importante fue EE. UU. con US$ 9 millones 154 mil, mostrando un decrecimiento de -23% y una participación del 30%. En segundo lugar se ubicó Corea del Sur (US$ 8 millones 191 mil), Colombia (US$ 1 millón 775 mil), Reino Unido (US$ 1 millón 349 mil) y España (US$ 1 millón 238 mil). Completaron el top ten Canadá, Japón, Emiratos Árabes Unidos, Panamá y Ecuador.

El ranking de productos fue liderado por el pallar, que ascendió a US$ 6 millones 402 mil, presentó un retroceso de -39%% y concentró el 21% del total. Le siguieron el loctao (US$ 6 millones 629 mil), frijol castilla (US$ 3 millones 500 mil), habas (US$ 3 millones 092 mil) y la arveja (US$ 2 millones 983 mil). Otros fueron el frijol de palo, adzuki, frijol común, tarwi, zarandaja, frijol canario, frijol negro, gandules, caballero y lentejas.

En 2023 (enero-diciembre), estos envíos ascendieron a US$ 135 millones 377 mil, mostrando una variación negativa de -3% en relación al 2022 (US$ 138 millones 906 mil).