El prototipo de caza furtivo de quinta generación ruso T-50 (PAK-FA) ya coincide por sus bajas posibilidades de ser detectado por radares con los F-22 y F-35 de EE.UU., superándolos en otras características, concluye un informe australiano.
Las características de alta invisibilidad del avanzado caza furtivo ruso T-50 (PAK-FA), todavía en desarrollo, prácticamente ya coinciden con las de cazas de quinta generación estadounidenses: F-22 y F-35. Es más, el diseño de la aeronave rusa ofrece buenas posibilidades de mejoras.
A tal conclusión llegó esta semana el doctor Carlo Kopp*, analista australiano independiente y autor de más de 300 publicaciones sobre el tema de defensa y armas, en el primer estudio científico del tema publicado en el portal aeronáutico Air Power Australia.
Al analizar detalladamente los aspectos que influyen en la Sección Transversal de Radar (o RCS, según las siglas en inglés, una medida básica de cuán detectable es un objeto mediante radares) del primer prototipo “volante” del T-50 (PAK-FA) desarrollado por el consorcio Sukhoi, el analista ha calculado que el T-50 es un poco menos “furtivo” que el F-22 Raptor estadounidense e igual de furtivo que el moderno F-35 Lightning II, pese a ser el T-50 de mayores dimensiones. Pero en muchos otros aspectos, el diseño del avión de combate ruso es realmente superior a los modelos estadounidenses.
“La conformación del T-50 es inferior a la de la Raptor F-22”, escribe Kopp en su muy detallado informe y añade: “sin embargo, el F-35 y T-50, exhiben un comportamiento de RCS similar”.
Según el examen del primer prototipo del avanzado caza ruso (Sukhoi ha construido cuatro prototipos de T-50), el especialista sugiere que los ingenieros del consorcio ruso tendrían que modificar, entre otras cosas, las formas geométricas de los motores y añadir un revestimiento del fuselaje con materiales que absorban mejor las ondas de los radares. En este contexto cabe recordar que de momento los prototipos del T-50 usan motores AL-41F1 (el llamado “artículo 117”; es decir, el modificado para su uso en cazas Su-35, el motor AL-41F1S), conocido como el “motor de la primera etapa”.
Según Kopp, con los motores y recubrimiento modificados habrá que esperar que el rendimiento RCS “satisfaga los requerimientos de muy baja detección [por parte de los radares]”. Es decir, una versión optimizada del caza ruso podría ser muy, pero muy difícil de detectar por la mayoría de los radares.
Las constantes mejoras son una práctica habitual para prototipos de aviones stealth que se aún se encuentren en desarrollo. Cabe destacar que tanto el F-22 como el F-35 sufrieron importantes cambios en su diseño y cada uno de ellos estuvo desarrollándose durante 15 años o más. Por su parte los prototipos del T-50 de Sukhoi han estado volando durante poco menos de tres años y la puesta en servicio del caza ruso no está prevista antes de 2016. Hay tiempo para que los ingenieros de Sukhoi den un retoque de “invisibilidad” al diseño.
Ventajas ya existentes del caza ruso
Es cierto que en 2016 los estadounidenses podrían tener cientos de cazas F-35 en el servicio operacional, más unos 180 cazas F-22 ya disponibles. Sin embargo, el T-50 podía compensar su retraso en el tiempo con un rendimiento impresionante que en algunos aspectos incluso supera a las características del F-22, el caza más caro del mundo.
Una de las ventajas del T-50 ruso es lo que Kopp llama “agilidad extrema plus”, nacida de su “avanzado diseño aerodinámico, excepcional relación empuje/peso y las prestaciones del empuje vectorial tridimensional integrado a un avanzado sistema digital de control de vuelo”.
La segunda ventaja del T-50 es su “excepcional persistencia en combate, el resultado de una enorme carga interna de 25.000 (más de 11 toneladas) libras de combustible”, escribe Kopp. El T-50 podría seguir volando y peleando mucho después de que los F-22 y F-35 agoten su combustible.
Es más, de acuerdo con Kopp, el T-50 podrá esquivar mejor algunos radares, puesto que los sensores estadounidenses son unos de los peores para detectar la forma única del T-50. Según el estudio de Kopp, los radares chinos, desarrollados para detectar cazas furtivos de EE. UU., “verán” al caza ruso con más facilidad. De acuerdo con el estudio, otros buenos radares para detectar a los T-50 serán los que funcionan en la banda UHF, instalados en aviones de alerta temprana E-2 de la Marina de EE.UU.
“No existen obstáculos fundamentales en el diseño de la forma del T-50 que puedan impedir su desarrollo hasta alcanzar una invisibilidad muy alta”, concluye Kopp.
Russia Today en Español, 19-11-2013
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* Carlo Kopp: “A Preliminary Assessment of Specular Radar Cross Section Performance in the Sukhoi T-50 Prototype” en Air Power Australia, 12-11-2012 en http://www.ausairpower.net/APA-2012-03.html
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