El ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, el socialdemócrata Heiko Maas, ha pedido este sábado la ayuda de las autoridades rusas para solucionar la crisis de Siria, mientras se dirigía a una reunión en Toronto (Canadá) de los cancilleres del Grupo de los Siete (G7).

“Necesitamos contribuciones constructivas de Rusia para alcanzar una solución pacífica”, no sólo en Siria sino también en el conflicto de Ucrania, ha dicho Maas a la prensa antes de volar hacia el continente americano, para la reunión del G7, formado tras la exclusión de Moscú del G8 en 2014, precisamente tras la crisis ucraniana.

La relación entre Rusia y los países occidentales se han tensado a niveles inauditos desde la Guerra Fría a lo largo de la última década, al chocar los intereses respectivos en una serie de sucesivas crisis internacionales, según denuncia el Kremlin por el expansionismo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Con sus declaraciones, Maas —que tiene previsto participar la semana próxima en una conferencia internacional sobre la crisis siria en Bruselas (Bélgica)— marcaba distancias respecto a la postura más antirrusa del partido de la canciller Angela Merkel, la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU, por sus siglas en alemán).

La conferencia de Bruselas se centrará en cuestiones de ayuda humanitaria a la población siria, ha afirmado el ministro de Exteriores antes de afirmar su apoyo al proceso de paz “auspiciado la Organización de las Naciones Unidas (ONU)” en el país árabe y reiterar la necesidad de una solución política al conflicto sirio.

Menos conciliadora que Maas con Moscú se ha mostrado sin embargo la ministra alemana de Defensa, Ursula von der Leyen (de la CDU), que este sábado ha defendido en declaraciones al semanario Bild am Sonntag los recientes lanzamientos de misiles contra Siria de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido.

Von der Leyen sostiene que Alemania no participó en la agresión del 14 de abril porque “esta vez no se nos pidió”, pero que el Ejército alemán hubiera podido hacerlo y que los ataques han reavivado iniciativas de paz. Un día antes, su homólogo ruso, Serguéi Shoigú, había dicho exactamente lo contrario.

Junto a postura antirrusa, la ministra germana reitera, no obstante, en sus declaraciones al dominical, la necesidad de negociar con el Gobierno de Damasco para conseguir un alto el fuego —pese a que de hecho ya hay en Siria desde el año pasado un régimen de alto el fuego con cuatro zonas de desescalada, garantizado por Rusia, Irán y Turquía—.

 

Hispantv, 22.04.2018